Guillermo y Lea llevan la alegría del rejoneo a Logroño

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Fotos: ANDRÉ VIARD

El primero fue un toro con poco motor y transmisión. Dos rejones clavados sobre Alquimista pararon en exceso al de Sánchez y Sánchez. Pablo Hermoso, que banderilleó y realizó las hermosinas con Berlín y toreó después montando a Januca y a Alabama para el rejonazo final, fue ovacionado.

Pablo Hermoso llevó a cabo una pundonorosa faena ante el cuarto, en la que todo lo hizo él. Arriesgó con Ilusión, con el que dio verdaderos “muletazos”. Donatelli elevó el tono con cabriolas en los previos y piruetas de salida tras clavar al estribo. Mató de un rejón bajo con Alabama y el público premió con un trofeo su labor. El toro salió como sus hermanos: soso y parado.

No redondeó Lea su faena al segundo, mal rematada con el de muerte. Montó a Bach de salida dejando dos rejones de castigo. Luego con Diluvio clavó banderillas al estribo toreando después con la grupa. El veterano Bazuka alegró los tendidos en los previos pero las pasadas en falso provocaron que no subiese la intensidad. Tras sacar a Espontáneo para matar al toro, hubo de echar pie a tierra y descabellar.

Lea Vicens levantó del todo la tarde ante el quinto, del que cortó las dos orejas. Fue este un buen toro de Sánchez y Sánchez, aplaudido en el arrastre. Con Guitarra clavó dos rejones que alegraron de salida el cotarro. Sobre Gacela dejó banderillas que no quedaron arriba pero los galopes a dos pistas metieron al público en la faena. Tres banderillas con Bético tuvieron más temple y un violín subió los decibelios.

Solo un par a dos manos de Guillermo Hermoso sobre Pirata ante el tercero pareció animar la corrida, de pocas emociones hasta su ecuador. Aunque el rejoneador no anduviese certero con el de muerte, paseó una oreja tras intentarlo con Barrabás, Índico y Brindis. El jinete anduvo muy por encima del parado burel.

Guillermo coronó su actuación cortándole las dos orejas al sexto, cuya lidia brindó a su cuadrilla y gente de confianza en la que ha sido su última corrida de la temporada española. Con Arsenio realizó espectaculares piruetas, metiéndose al público en el bolsillo. Sin embargo, la apoteosis llegó con Pirata, primero con dos preciosas rosas y, a continuación, con un par a dos manos redondo. Mató de un rejón bien colocado y aunque hubo de echar pie a tierra no cesó la comunión con el público. Al final, tanto él como Lea abrieron la puerta grande.

Logroño, domingo 22 de septiembre de 2019. Feria de San Mateo. Toros de Hros. de Sánchez y Sánchez. Sosos y nobles los cuatro primeros. De mucho mejor juego los dos últimos. Pablo Hermoso de Mendoza, ovación y oreja; Lea Vicens, silencio y dos orejas; y Guillermo Hermoso de Mendoza, oreja y dos orejas. Entrada: Más de media.

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