Ha muerto un torero y un amigo

Ha muerto Francisco Barrios “El Turia”, un torero de gran personalidad y un hombre bueno. Le había visto torear varias veces, algunas en Barcelona y otras en Valencia...

Ha muerto Francisco Barrios “El Turia”, un torero de gran personalidad y un hombre bueno. Le había visto torear varias veces, algunas en Barcelona y otras en Valencia, y algunas plazas más cuyos ruedos pisó con valentía y pundonor, haciendo patente que no era uno más. No tuvo suerte y no escaló la cima con la que sueñan todos los que se visten de luces. Le conocí personalmente y le traté durante mis años de estancia en Valencia dirigiendo Radio Nou, cuyo programa taurino, dirigido por José Luis Benlloch ayudado por Isabel Donet, frecuentó muchas veces como invitado. Era un hombre bueno con el que la conversación era siempre cordial y amable. Su largo periodo como director de la Escuela de Tauromaquia de Valencia le permitió permanecer en el ambiente taurino, que era lo que más llenaba su vida de torero retirado, pero siempre torero al fin y al cabo.

Son muchas las anécdotas que se podrían explicar de aquella época, que demostraban su carácter serio y tranquilo, que no siempre fue bien entendido por amigos y familiares de los alumnos de la Escuela, a los que en ocasiones sufrió más que disfrutó. No obstante él siempre actuó pensando en el beneficio de los alevines de torero a los que trasmitía sus saberes sobre el noble arte de la Tauromaquia. Fue uno de los toreros valencianos con sello propio, y quizás esta sea la hora de reconocérselo públicamente. Valencia es archivo de cortesía y El Turia bien se lo merece. Descanse en la paz que merecen los que entregaron su vida al arte del toreo.

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