Esos son los últimos titulares. Por lo demás fechorías y fechorías, una tras otra, de los anti. Mucho me temo que nos tengamos que acostumbrar a convivir con ello...
Fechorías y fechorías, una tras otra, de los anti. Mucho me temo que nos tengamos que acostumbrar a convivir con ello. Y si malo son sus bufonadas, peor o mucho peor aún es el rédito o resonancia mediática que obtienen hasta de las tribunas más cualificadas.
Pese a todos los ataques, se celebraron 8.500 festejos taurinos en la Comunidad Valenciana, un seis por ciento más que el ejercicio anterior y sólo tres pueblos acabaron cediendo ante los abolicionistas. Nada que ver con lo que cuentan en la tele.
