Dice la ministra de Cultura que todo está a punto para el paso del toreo a su ministerio. Puntualizando, una vez más, que en lo único que consistirá dicha operación es en la inscripción del "registro de artistas"a la nueva situación…
Dice la ministra de Cultura que todo está a punto para el paso del toreo a su ministerio. Puntualizando, una vez más, que en lo único que consistirá dicha operación es en la inscripción del "registro de artistas" a la nueva situación. Como también afirma que los técnicos están estudiando la manera de dar satisfacción a las aspiraciones de los toreros, habría que saber con claridad y concreción en lo que éstos fundamentan su interés en cambiar de ministerio. Teniendo en cuenta que el paso a Cultura es algo más complejo que "satisfacer" a los coletas. También los empresarios, ganaderos y el público deberán ser atendidos en sus legítimas aspiraciones. Por ejemplo; ¿pasar a Cultura significará la desaparición del imperio de la llamada autoridad gubernativa en el desarrollo del espectáculo? Porque estar en un ministerio que reconozca oficialmente el toreo como arte, no es compatible con que un equipo policial decida sobre el trapío y presentación de los toros, la concesión de trofeos y la aplicación del reglamento en general. Para ese viaje no necesitábamos alforjas. Que eso ocurriera sería un auténtico toco-mocho.
El Ministerio de Cultura deberá cuidarse de la modificación de la fiscalidad que incide en todos los actores de la Fiesta, que pesa sobre su desarrollo como una losa. La confección de pliegos de adjudicación de las plazas de toros, deberá dejar de depender exclusivamente de la voracidad recaudatoria de los propietarios de los inmuebles -diputaciones y ayuntamientos- que hacen a muchos de ellos inaccesibles, en momentos tan críticos económicamente como los que vivimos, en los que la rentabilidad del negocio taurino no es justo que recaiga solamente sobre quienes pasan por taquilla. La señora ministra no puede pretender lidiar el asunto con un simple traspaso del "registro de artistas del toreo". El señor Rubalcaba, que tanto manda ahora, debería poner todo su empeño en resolver todos esos problemas. Asesorado por La Mesa del Toro, y por todos aquellos que intervienen en la supervivencia de la Fiesta Nacional. Lo contrario sería poner paños calientes a una situación enconada por un error de cientos de años.
Acceda a la versión completa del contenido
Hay mucho que trillar
Jarocho se vendió caro y cotizó al alza en su presentación en Madrid. Su triunfo…
Jarocho se vendió caro y cotizó al alza en su presentación en Madrid. Su triunfo…
"Esa es la visión que quería que vieran de mí. Este es Ismael Martín". Son…
La juventud y el futuro sacó a hombros a Jarocho en su salida por la…
La empresa Lances de Futuro ha dado a conocer esta tarde los carteles de la…
Alejandro Peñaranda se la jugó con el exigente cuarto y sufrió una fea y tremenda…