Categorías: Revista

Hay que darles donde más les duela

Noviembre no tiene lidia. Creo que la frase fue de El Gallo. Fuese de quien fuese todavía tiene vigencia. Salvo escaramuzas en los despachos, alguna más de las que trascienden, hay poco tajo informativo. Lima, donde Álvaro Lorenzo estrenó apoderado, y México, donde Ponce y Ventura estrenaron la Temporada Grande, cuyos resultados encontrarán páginas más adelante, eran los puntos de interés a la hora de cerrar esta columna. Las otras cuestiones se cocían en el tercio del activismo anti, que comienza a producir hastío y no sé si esa disyuntiva es buena o mala, si favorece o nos hunde. Si bajas los brazos y dejas que te resbalen tantas y tantas obscenidades ideológicas como manejan, en eso son unos auténticos maestros, trileros de la dialéctica, en ese caso te creas mala conciencia, como una sicosis de rendición. Si te alteras y te pones a vocear la indignación y les replicas es como darles pábulo y das imagen de debilidad pública, ayudas a crear en la sociedad un estado de opinión apocalíptica que no nos favorece.

Es lo que está sucediendo, hasta el punto de que los más indiferentes en la cuestión ante tanta guerra y tanto ataque tienen la idea de un final próximo e inevitable para los toros, ambiente que no me gusta nada ni nos favorece. Y en ese dilema si me permiten el personalismo me muevo, tanto en el territorio particular como en el periodístico. ¿Respuesta o indiferencia? Es la cuestión, la duda. Seguramente ni una cosa ni otra, inteligencia y contundencia me parece más oportuno. Intentar darles donde más les duela. En las urnas mismamente. Si ochocientos puestos de trabajo en peligro (en los astilleros) han hecho que se llegue a establecer la delirante división entre las bombas que matan buenos y las bombas que matan malos para desdecirse de su demagogia anterior, por qué, me pregunto, no salir a defender los puestos de trabajo, muchos más de ochocientos, que dejaría en el aire una hipotética prohibición de los toros. Seguramente habría que quemar neumáticos o colapsar una ciudad para que nos atendiesen, seguramente. Suena a extremismo, a asonada, pero es lo que entienden y habría que hacerlo. A estas alturas una defensa razonada del tema comienza a parecer definitivamente inoperante.

Lea AQUÍ el artículo completo en su Revista APLAUSOS Nº 2146 para todas las plataformas en Kiosko y Más

Lea AQUÍ el artículo completo en su Revista APLAUSOS Nº 2146

Lea AQUÍ el artículo completo en su Revista APLAUSOS Nº 2146 para iPad

Lea AQUÍ el artículo completo en su Revista APLAUSOS Nº 2146 para Android

Acceda a la versión completa del contenido

Hay que darles donde más les duela

José Luis Benlloch

Compartir
Publicado por
José Luis Benlloch

Entradas recientes

La primera de Jerez, en los pinceles de Humberto Parra

Humberto Parra seguirá ofreciendo a los lectores de Aplausos su indiscutible arte a través de…

7 horas hace

Pedro Rufo, triunfador del prestigioso Bolsín Taurino de Bougue

Pedro Rufo, hermano del matador de toros Tomás Rufo, alumno de la escuela taurina Domingo…

7 horas hace

Jorge Hurtado, tras ganar el Alfarero de Plata: “Esto es el esfuerzo y la recompensa a todo este tiempo”

Jorge Hurtado se proclamaba este domingo vencedor del Alfarero de Plata en Villaseca de la…

7 horas hace

Jorge Hurtado se proclama ganador del Alfarero de Plata

Este domingo 5 de mayo se celebraba la gran final del X Certamen de novilladas…

7 horas hace

Triunfal festejo de rejones en Ibros; Cámara y Olivas, a hombros en Colmenar de Oreja

Ibros (Jaén). Rejones. Reses de Roque Jiménez . Sebastián Fernández, dos orejas y oreja; y Ferrer Martín, silencio y…

8 horas hace

Ventura y Cartagena redondean en triunfo el inicio de Jerez

Domingo de feria en Jerez de la Frontera, tierra del vino y del caballo por…

9 horas hace