Una de las ganaderías insignes del campo charro con sangre Domecq es la de Hermanos García Jiménez. La familia Matilla ha logrado criar un toro muy apetecible para las figuras y no menos para los empresarios. Alrededor de seis corridas de toros y un par de novilladas lidió la temporada pasada, con la regularidad característica de este hierro. El de García Jiménez es un toro armónico y con la virtud generalizada en todos sus astados del ritmo y la clase.
“Nunca nos hemos salido del prototipo de toro que queremos. No buscamos las caras, sino que el toro esté bien hecho”
“Mientras lidie todo lo que tenga y los toros sigan embistiendo, seguiré con el mismo número de animales”
“No nos gusta lidiar en nuestras plazas porque es cargar con una doble responsabilidad. Prefiero lidiarlas en otros sitios”
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