GALERÍA FOTOGRÁFICA DE RAÚL ARBOLEDA
Hermoso de Mendoza se aseguró la puerta gran tras desorejar por partida doble al tercero. El navarro cuajó una faena precisa y medida montando a Unamuno y Mayoral, con quien expuso y arriesgó, y sobre Chenel, con quien formó un alboroto, lo que llevó la emoción a los tendidos. Mató de rejonazo efectivo. El sexto que cerró fue un toro parado y aplomado. Todo lo tuvo que hacer el navarro que destacó a lomos de Dalí, provocando las embestidas y luciéndose en vistosas piruetas. Mató de un rejonazo defectuoso.
Iván Fandiño hizo un esfuerzo ante el descastado y rajado segundo. El vizcaíno logró con mando y firmeza meter en cintura al toro en una primera parte de faena ligada e inteligente. Le encontró las distancias el torero que tiró de recursos en la parte final y tras una gran estocada paseó un trofeo. Claro lo vio Fandiño ante el quinto, un toro deslucido y bajo de raza. Muy puesto el torero, corrió la mano con templanza y limpieza en una labor a media altura, de series cortas, dentro de un conjunto en el que entendió muy bien a su oponente. Seguro y fácil Fandiño, cerró con manoletinas y una estocada contundente. Oreja.
Abrió plaza un toro que manseó en los primeros tercios y que embistió con calidad en la muleta aunque sin empuje. Manrique dejó ante él una faena dispuesta, de más a menos, y que no llegó a tomar vuelo. Desrazado, sin fijeza ni entrega resultó su segundo. El diestro local estuvo de nuevo voluntarioso en una faena de muchos muletazos pero sin lucimiento. No anduvo acertado con los aceros.
Medellín (Colombia), sábado 1 de febrero de 2014. Toros de Agualuna. Pepe Manrique: Silencio en ambos; Iván Fandiño: Oreja y oreja con petición de la segunda; el rejoneador Hermoso de Mendoza: Dos orejas y ovación con saludos. Entrada: Tres cuartos.