Hace dos años decidió dejar su país para adentrarse en la aventura de querer ser torero en España. Tras formarse en las escuelas de El Juli y la provincial de Málaga, Joaquín Galdós debutó con caballos este verano en La Malagueta y sumó un total de nueve novilladas con más de veinte orejas cortadas en poco más de un mes. Carrera a propulsión, paralela a la de su paisano Roca Rey. Ambos compartieron paseíllo el pasado sábado en Lima. Juntos forman la nueva imagen taurina de Perú.
“Cada toro es un desafío y con cada animal uno debe dar una dimensión de alguien que quiere ser figura del toreo”
“El torero debe tener prestancia, imagen y saber estar. Es un artista y debe expresar lo que hace al público. En mi caso, intento transmitir”
“Francia es la afición más justa del mundo. Cada uno tiene lo que se merece, su justa recompensa”