Recorrió la piel de toro de feria en feria siendo aún novillero. Ahora, como matador de toros, Julio Pedro Saavedra resurge en el escalafón tras temporadas de escasas actuaciones. Una etapa en su carrera marcada por el lastre que le dejó la fuerte cogida de Valdemorillo. La de 2010 ha sido para el madrileño una temporada bonita pero también dura.
PARA EL RECUERDO: “La tranquilidad, la pausa y la visión que he tenido delante del toro”
PARA EL OLVIDO: “Que hayan sido solo siete corridas de toros”
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