Una vez conocida la decisión de la retirada de la proposición de ley que pretendía prohibir las corridas de toros en Francia, el Observatorio de las Culturas Taurinas y la Union de las Ciudades Taurinas de Francia remitió un comunicado en el que expresaban su satisfacción ante una nueva victoria del toreo.
Al retirar su proyecto de prohibición de las corridas de toros antes de la votación que preveía desfavorable, la Francia Insumisa ratificó la ley de 1951 y confirmó la excepción cultural establecida por esta última en beneficio de las corridas de toros en sus regiones de tradición. La Union de Ciudades Taurinas de Francia agradece al presidente de la República y al Gobierno el apoyo claramente expresado a favor de la libertad cultural de las regiones taurinas, así como a todos los diputados cuya intención de voto mayoritario, como en el seno de la Comisión de Leyes, disuadió a la Francia Insumisa de ir al final de la propuesta del diputado Caron, abandonado por su propio grupo antes de la votación inminente de las enmiendas de rechazo de la totalidad del texto.
Esta propuesta emanaba de una ideología anti humanista, el antisemitismo, y es de esperar que la perspectiva de un fracaso mordaz en la corrida de toros probablemente disuadirá a la Francia Insumisa de seguir poniendo en peligro las numerosas actividades ya tomadas como blanco por las fundaciones y partidos que se reivindican de ella.
Después de cinco meses de tensos debates, la democracia se manifestó.
La corrida de toros es y seguirá siendo una expresión cultural legítima en sus regiones tradicionales.
