En su día la primera Corrida Goyesca con mayúsculas tuvo sentido propio. Eduardo Pagés decidió celebrar en Murcia en 1929, con un año de retraso, el centenario de la muerte en Burdeos de Francisco de Goya con un festejo de resonancias dieciochescas. El patrón no quedó fijado en Madrid hasta un cuarto de siglo después: coches de caballos de época, paseo de majos y manolas por la arena, despeje de plaza antes del paseíllo, palcos engalanados. La evocación del despeje de plaza, clave en la conformación del espectáculo, y, desde luego, la tropa entera de espadas y cuadrillas, monos, mulilleros y areneros vestida según el canon de indumentaria fijado en tapices, pinturas y láminas de Goya o de Antonio Carnicero. La sola excepción de los alguaciles, de riguroso negro Habsburgo.
Lea AQUÍ el artículo completo en su Revista APLAUSOS Nº 2034
Lea AQUÍ el artículo completo en su Revista APLAUSOS Nº 2034 para iPad
Lea AQUÍ el artículo completo en su Revista APLAUSOS Nº 2034 para Android
Acceda a la versión completa del contenido
La gran fiesta de Arles
La empresa de la plaza de toros de Millas (Francia) ha cerrado el cartel de…
Miguel Ángel Perera protagonizará un encuentro con la afición venteña el próximo martes 7 de…
El Grupo Parlamentario Popular en el Senado registrará una moción en la Cámara, en la…
Andrés Roca Rey hace un llamamiento contra la decisión del Gobierno de retirar el Premio…
La Real Unión de Criadores de Toros de Lidia, Unión de Toreros, Asociación Nacional de…
La Junta de Extremadura ha manifestado su voluntad de asumir la convocatoria y concesión del…