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La terna se estrella con los de Partido de Resina

FOTOS DE JAVIER ARROYO DEL FESTEJO

VÍDEO RESUMEN DEL FESTEJO

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Fotos: JAVIER ARROYO

Una muy deslucida corrida de Partido de Resina dio al traste con las ilusiones de la terna de este lunes en Madrid. Eduardo Gallo, Sebastián Ritter y Rafael Cerro se estrellaron ante las muy escasas posibilidades del encierro del legendario hierro sevillano.

El primero fue un toro bien hecho, cárdeno de pelaje. Tuvo la virtud de la nobleza y el no molestar pero marcó pronto su mansedumbre, resultando bajo de raza y embistiendo protestando con las manos por delante en el segundo tramo del muletazo. Ante él dejó un valiente quite por gaoneras Sebastián Ritter y el salmantino Eduardo Gallo mostró disposición por ambos pitones pero sin que su trasteo pudiera alcanzar brillantez, rubricándolo de una estocada atravesada.

El cuarto manseó de principio a fin, marcando mucho las querencias durante su lidia. Anduvo solvente el salmantino, que logró extraer una tanda buena por el pitón derecho, pero luego el toro se negó y se rajó, resultando imposible, defendiéndose y metiéndose por dentro. Mató de una estocada casi entera.

El segundo fue un toro manejable, con movilidad y duración, que tuvo nobleza pero no terminó de humillar. Duró en gran medida porque lo entendió bien Ritter, que nunca le obligó y supo templarle sin violentarle, ejecutando todo con mucha suavidad. Faena de buen oficio, que contó con una notable serie por el pitón derecho. Hubo pasajes buenos, pero con la espada anduvo muy desafortunado. Fue silenciado y el toro, aplaudido.

Deslucido, topando y sin ninguna opción de lucimiento salió el quinto. Ritter se estrelló frente al nulo juego del de Partido de Resina. Estocada corta desprendida y silencio.

El tercero, un toro cuajado y ovacionado de salida, fue deslucido en cuanto a comportamiento. Se quedaba corto, reponía y medía mucho, resultando complicado. Cerro, lidiador de salida con el capote bajando los brazos y llevándose al astado hasta los medios, quiso dar la cara y fajarse con él para intentar superar las dificultades. Valentón y tesonero el extremeño en un quehacer de poca brillantez. Mató de estocada caída.

El sexto se movió pero con la cara alta y sin clase. Cerro cumplió en una faena de muchos muletazos, tratando siempre de templar la embestida. No hubo brillo y tampoco acierto a espadas.

Madrid, lunes 1 de junio de 2015. Toros de Partido de Resina, desiguales de presentación, deslucidos y descastados en líneas generales. Algo más manejables 2º y 6º. Eduardo Gallo, silencio tras aviso y silencio; Sebastián Ritter, silencio tras aviso y silencio; y Rafael Cerro, silencio en su lote. Entrada: Menos de tres cuartos de plaza.