Una apuesta decidida por las figuras junto a un envite serio y de verdad por un par de carteles toristas, esas son las bases sobre las que se asienta la feria nimeña a juicio de un Simón Casas que hace una encendida defensa de la obligación de los empresarios por aunar en sus combinaciones todas las sensibilidades del público. Claro como siempre, pasional por convicción, el gestor francés expone la necesidad de buscar la exclusividad, la grandeza y la emoción de la tauromaquia como vehículo para conquistar el éxito artístico y económico. En sus palabras revela que hay vendidas cerca de 15.000 localidades más que el curso pasado y que hay tardes donde el boletaje ha aumentado un cien por cien.
- “La grandeza de estos carteles se ha traducido en que el abono ha subido un 20 por ciento y venderemos 15.000 entradas sueltas más que en 2012”
- “La mente debe estar abierta a disfrutar con las figuras y con un cartel torista, no hay que cerrar puertas sino abrirlas”
- “Mi alianza con Cutiño no es sólo mercantil, sino artística”
