Luis Francisco Esplá atendió a los micrófonos de los compañeros de Toros TV al salir de la enfermería de la plaza tras la soberana paliza sufrida con el segundo de su lote: "Me dicen que parece una luxación del cartílago de las costillas. Había que estar delante del toro, no era fácil, lo he dejado vivito, pero tenía sus complicaciones, había que aguantar esa calentura que desarrollaba. En la cogida he equivocado los terrenos y he pensado que si me iba a coger, mejor que me cogiera quieto. Pero todo ha sido muy bonito, después de tantos años sin aspirar a pisar un ruedo, a no notar el pulso del público, te encuentras con esta aventura maravillosa. Me lo he pasado muy bien con paliza incluida, recuerdas cómo sacuden los de cuatro año cuando cogen. Esto no es para turbarse, si no me ha hecho nada no iba a hacerme el muerto, es una obligación de los toreros volver a la cara del toro".