Cerró la Corrida de Beneficencia un toro amplio, muy astifino, de nombre Bromista, de Garcigrande. Un toro que se frenó extrañado al salir del chiquero pero que no dejó de embestir hasta que fue arrastrado. Fue en este sexto cuando se vivió el momento cumbre del festejo. Fernando Adrián lo cuajó y sumó una oreja -pudieron ser dos al fallar con la espada tras un inoportuno resbalón del toro- que le abría la puerta grande de Las Ventas, la tercera que conquista de forma consecutiva. Revive el festejo en la galería fotográfica de nuestro compañero Javier Arroyo.