Categorías: Noticias

Manzanares y David Galván, a hombros en Algeciras

GALERÍA FOTOGRÁFICA DE GONZÁLEZ ARJONA

VÍDEOS RESUMEN DEL FESTEJO

José María Manzanares, con tres orejas, y David Galván, con dos, han sido los dos triunfadores de la segunda y última corrida de la Feria Real de Algeciras. Los diestros han aprovechado las bondades de tres buenos toros de El Pilar.

Faena pletórica de José María Manzanares en el quinto de la tarde. El alicantino ha sacado partido a la buena condición del de El Pilar, que tenía recorrido y transmisión, para cuajar una actuación repleta de elegancia, empaque, estética y toreo bueno. Superiores han sido las tres primeras tandas, quince muletazos donde el toro se ha empleado y Manzanares ha toreado con temple, ajuste y ese gusto que tiene el alicantino. Por el pitón izquierdo el toro se ha parado, pero por el derecho ha embestido con clase y fijeza. Ha matado de una gran estocada hasta las cintas en la suerte de recibir. Antes había cortado una oreja en el segundo de la tarde, un toro repetidor, de buena condición pero al que le ha faltado emoción en sus embestidas. Manzanares ha construido una faena de menos a más donde lo más destacado ha llegado de mitad en adelante de labor, tramo en el que ha habido más acople, sobresaliendo una tanda de alta nota sobre el pitón derecho y otra al natural bien rematada.

El otro triunfador ha sido David Galván, que ha paseado dos orejas en el tercero de la tarde, un buen toro de El Pilar. Gran faena del gaditano desde que lo ha recibido toreando muy bien a la verónica, para más tarde protagonizar un ajustado quite por chicuelinas. Con la muleta ha estado valiente y muy torero. Ha habido muletazos sensacionales, pasándose el toro muy cerca y con mucho gusto. La principal virtud ha sido quedarse en el sitio para ligar los muletazos en varias series de excelente factura rematadas con buenos pases de pecho. El epílogo acortando las distancias, con circulares y manoletinas ha servido para caldear a los tendidos. Estocada y dos merecidas orejas. En el sexto ha estado por encima de un toro que ha desarrollado peligro. Galván ha derrochado entrega ante los regates del peor toro del encierro de El Pilar. Imposible.

Enrique Ponce ha despachado un lote tan noble como insulso. El primero de la tarde ha sido un astado que nunca ha humillado. Ponce tampoco se ha llegado a acoplar con él. Lo ha intentando por ambos pitones sin lograr lucimiento ante la deslucida embestida del animal. Tampoco ha estado fino con los aceros. Casi idéntico patrón ha seguido el cuarto, con el que el valenciano ha porfiado para intentar extraer faena sin éxito. Labor intermitente en la que sólo ha podido dejar buenos muletazos sueltos sobre el pitón derecho. Otra vez mal con la espada.

Algeciras, 27 de junio de 2014. Última de la Feria Real. Toros de El Pilar, desigualmente presentados, con más cuajo los tres últimos. El primero, noble pero desclasado. El segundo, repetidor pero sin transmisión. El tercero, con movilidad. El cuarto, soso. El quinto, con recorrido, clase y fijeza. El sexto, con peligro. Enrique Ponce, silencio y ovación cariñosa con saludos tras aviso; José María Manzanares, oreja y dos orejas; David Galván, dos orejas y silencio. Entrada: Dos tercios de plaza.