Un señor toro, con cuajo, enmorillado, muy rematado, un pavo con pitones, así fue el primero de Castillejo de Huebra, que entró dos veces al caballo, cuidándolo mucho. Brindó al público y empezó de rodillas sobre la diestra Juan de Castilla. El toro tuvo prontitud y fijeza, y el colombiano lo pasó sobre ambas manos, destacando una serie de naturales y otra en redondo, ambas templadas y llevando al toro toreado hasta el final. Cerró por manoletinas de rodillas y una estocada entregándose en la suerte. El toro murió con la boca cerrada. Sonó un aviso. Cinco descabellos.
Bien presentado, cornivuelto pero blando, perdió las manos un par de veces el segundo en el capote de Carlos Olsina. Medido el castigo en las dos entradas. Tenía un tranco extraordinario. Pero no le acompañaron las fuerzas; al tercer muletazo perdió de nuevo las manos. Alternó ambas manos Olsina, que remató de estocada ladeada tras pinchazo.
El tercero, que le correspondió a Manuel Diosleguarde, cumplió a secas en el caballo. Buen inicio del salmantino por alto, muy jaleado por el público. Tuvo continuidad el estimable prólogo en dos series sobre la derecha. Por la mano izquierda el toro tenía menos celo. Faena correcta pero sin demasiado eco en los tendidos. Mató de estocada baja.
José Fernando Molina entró en el cartel sustituyendo a su compañero Víctor Hernández, herido el viernes en Sacedón. En este turno entró en quites Calerito, por chicuelinas. Brindó la faena al público antes de una apertura genuflexa y dos series de derechazos correctas, con el toro humillando. La faena creció con naturales cosidos, dando los toques precisos y el tiempo justo. Mató de buena estocada y paseó una oreja.
Bien hecho, fino de cabos, el quinto fue devuelto al partirse el pitón derecho por la cepa. Lo despachó Calerito en el ruedo, que se fue a recibir al sobrero a portagayola. El toro, muy bien hecho, salió con mucho pies y galopó con clase. Se le midió el castigo. Se vencía el toro por el lado derecho, y al natural, el sevillano -que sustituyó a Ángel Téllez– no encontró tampoco la solución ni el ritmo del toro. Mató de una estocada entera y ladeada, y dos golpes de descabello.
El sexto, muy serio, imponía por su trapío. Cristian Parejo anduvo con la cabeza despejada, luciéndose en el toreo en redondo, con mucho aplomo en tres series abundantes y templadas. Valiente y firme el torero de Chiclana afincado en Beziers. Mató de una buena estocada y paseó una oreja.
Bayona (Francia), sábado 31 de agosto. Toros de Castillejo de Huebra (5º bis). Corrida muy bien presentada, variada de comportamiento. Algunos escasos de fuerza. Para la muleta, buenos primero, cuarto y sexto, el más encastado del envío. Juan de Castilla, vuelta al ruedo tras aviso; Carlos Olsina, silencio; Manuel Diosleguarde, ovación con saludos; José Fernando Molina, oreja; Calerito, ovación con saludos; Cristian Parejo, oreja. Entrada: Dos tercios de plaza. Saludaron en el tercero Bonifacio Martín y Fernando Sánchez, y David Pacheco y Mateo Guillon “El Monteño”, en el quinto.
