Morante de la Puebla recibió ayer en su casa de La Puebla del Río a los alumnos de la Escuela Taurina de Málaga, que se encontraban en Sevilla con motivo de una visita para conocer mejor los lugares donde vivieron Joselito “El Gallo” y Juan Belmonte. Después de enseñarle las dependencias de su finca, Morante conversó con ellos durante más de una hora y media, explicándoles su tauromaquia, su filosofía del toreo y atendiendo a las preguntas de los alumnos.
El torero de La Puebla impartió una lección magistral sobre conceptos como el temple o la torería. “Un torero no es un domador; lo que le diferencia del resto del mundo es la torería”. Habló sobre Belmonte y Joselito: “Belmonte fue el que trajo el temple. Hasta antes de Belmonte el temple no existía. A mí me gusta mucho el toreo antiguo porque es más esencial. Es un toreo hecho más para el toro, sin tantos alardes, sin querer tanto agradar, más serio”.
También le preguntaron sobre la técnica: “La técnica es muy fría y está ajena de sentimientos, a mí me gusta que el toreo esté lleno de personalidad. Hay que estudiar la historia del toreo, leer mucho, ver muchos vídeos. Porque el conocimiento es lo que te permite desarrollar la personalidad”.
Morante incluso se atrevió a dar algunos consejos a los novilleros sobre esa etapa inicial tan importante para un torero. “Muchas veces me he equivocado y cuando uno empieza lo que quiere es triunfar, cortar orejas y hay veces que el camino no es el correcto. Esto es una carrera en movimiento y hay que reaccionar rápido. Con el tiempo uno va desarrollando lo que más le gusta”.
También les explicó algunas claves de su toreo: “El toreo de salón es muy importante, porque es el toreo que te permite pensar. Con el tiempo vas conociendo al toro y conociéndote tú. Hay que estar abiertos porque si se hace caso a los tópicos no creces”.
Tras la visita a la casa de Morante de la Puebla, los alumnos recorrieron las calles de Gelves, pueblo natal de Joselito “El Gallo” y posteriormente acudieron al barrio de Triana y a la plaza del Altozano para recordar a Juan Belmonte.
