Sucedió el 6 de junio de 2007. Morante de la Puebla se anunciaba en solitario con seis toros en la plaza de toros de Las Ventas. La tarde estalló definitivamente en el último toro. Desde que se abrió de capa Morante explotó en un toreo que brillaba tanto cuando se paraba como cuando le caminaba al toro, en las entradas, en las salidas, en el embroque, con la capa, con las banderillas, con la muleta... como demuestran las imágenes que hoy recuperamos para saciar la sed de toreo en estos tiempos.