Morante de la Puebla es un hombre perfeccionista. El sevillano no quiere dejar ningún detalle al azar. Esta vez lo ha hecho en la Plaza México, donde este domingo hará el paseíllo en la corrida Guadalupana. El festejo, en honor a la patrona del país, cuenta con varios detalles artísticos, entre ellos, la decoración de las tablas del coso con la silueta de sesenta y cuatro toros, obra de la pintora y ganadera Isabel Garfias. El torero de La Puebla, horas antes de comparecer en la monumental, ha querido visitar la obra y dar su visto bueno. Cabe recordar que recientemente ha manifestado su desaprobación con ciertas decoraciones y vestimentas en corridas de toros que conmemoran acontecimientos históricos.

Isabel Garfias ha pintado la silueta inconfundible del toro bravo en colores que van desde el negro hasta el blanco, pasando por otros más brillantes. A la figura del toro le acompañan palabras escritas relacionadas con el toro y el toreo, tales como bravura, nobleza, hondura, temple, señorío, libertad, pasión, genética, entrega, tradición, ecología, identidad, afición y admiración. Es la tercera ocasión que Isabel Garfias plasma su obra en una plaza de toros, con anterioridad lo hizo en la Plaza Oriente de San Miguel de Allende y en la plaza Acho de Lima (Perú).


