La Consellería de Gobernación de la Comunidad Valenciana ha sancionado a la alcaldesa de la localidad castellonense de Les Alqueries con una multa de 300 euros por indultar un novillo durante el festival taurino celebrado en octubre del pasado año, algo antirreglamentario por tratarse de una plaza de toros portátil. Según el Reglamento de Espectáculos Taurinos, sólo se puede indultar en plazas de primera y segunda categoría, y no en las de tercera y portátiles.
La alcaldesa, Consuelo Sanz, que presidía el festejo, le perdonó la vida al 5º toro de la tarde, de nombre "Taponero", de la ganadería de Garcigrande y que fue lidiado por Alejandro Talavante. El toro fue bravo y la alcaldesa sacó el pañuelo naranja ante la insistente petición del público que llenaba el coso portátil.