GALERÍA FOTOGRÁFICA DE JOAO SILVA DEL FESTEJO
El veterano rejoneador Rui Salvador, rubricó con el toro que rompió plaza su mejor actuación de los últimos tiempos. Salvador puso de manifiesto toda su experiencia, sabiduría y verdad. Entró una y otra vez de frente hasta consumar suertes de nota alta, en terrenos de compromiso, rematadas con elegancia y sobriedad.Frente al cuarto, el único manso del encierro, desarrolló una labor esforzada, sin opciones de éxito.
Filipe Gonçalves, quien sorteó el mejor lote, conectó rápidamente con los tendidos. Toreó a dos pistas, citó con espectacularidad, realizó suertes variadas, piruetas… No todo le salió perfecto, pero encandiló el público y triunfó. El joven Marcos Bastinhas demostró sus progresos en cuanto a su sentido de lidia, mezclando alegría, ligazón, entrega, lo que le permitió estar a la altura del bravo toro que cerró plaza. Con el tercero, llevó a cabo una faena de altibajos, aunque siempre con mucha decisión.
TRIUNFAN LOS FORCADOS DE APOSENTO DE CHAMUSCA
Los forcados fueron los reyes de la sexta del abono de Campo Pequeno, con un Concurso de Pegas, donde se vivieron momentos de gran emoción. Los tres grupos en competencia -San Manços, Amadores de Chamusca y Aposento de Chamusca- realizaron excelentes “pegas de caras”, sobre todo las ejecutadas por Nuno Marques (cabo de los Amadores de Chamusca) y Francisco Montoya (grupo del Aposento), este último el ganador del trofeo en disputa.
La concesión del premio fue protestada por una parte del público, pero el galardón más importante lo habían ganado ya todos los forcados en la plaza por su entrega colectiva ante toros muy serios, dignificando así esta peculiar modalidad taurina. La otra nota destacada de la noche la puso el magnífico juego de los toros de Antonio Charrua que, además de trapío, ofrecieron óptimas condiciones de lidia, no siempre aprovechadas.
