Joselito, junto a la organización y demás miembros de la mesa.El maestro madrileño, presente junto a Felipe Díaz Murillo y José María Álvarez del Manzano en la Jornada en Defensa de la Fiesta organizada por la Universidad CEU San Pablo de Madrid.
Esta tarde ha dado comienzo la décima edición del Aula de Tauromaquia de la Universidad CEU San Pablo de Madrid con una Jornada en Defensa de la Fiesta de los Toros en la que han participado el matador de toros y ganadero José Miguel Arroyo “Joselito”, el director gerente de la Escuela de Tauromaquia “Marcial Lalanda” de Madrid, Felipe Díaz Murillo y el que fuera alcalde de la capital y en la actualidad senador y presidente de IFEMA, José María Álvarez del Manzano.
Joselito, en referencia al traspaso de la gestión de los festejos taurinos al Ministerio de Cultura, ha expresado su desconfianza hacia esta medida y ha advertido que la irrupción de Cultura en la gestión de los festejos puede suponer “otro impedimento más para celebrar una corrida de toros” en un mundo, como del toreo, “que ya está suficientemente burocratizado”.
En una reflexión sobre el toreo y su esencia, Joselito ha reivindicado el mundo del toro como uno de los pocos lugares donde aún hay “esos valores éticos y morales que ahora faltan”. Una ética que nace de un triple respeto: “al animal, al público y a uno mismo”. “Yo respeto al animal, porque le doy a elegir, puede elegir mi propio cuerpo, mi propia vida”, ha afirmado.
En cuanto al traspaso del toreo al Ministerio de Cultura, Felipe Díaz Murillo ha considerado que la medida responde a una “maniobra política” de Alfredo Pérez Rubalcaba. Díaz Murillo cree que, con este tema y con el de la prohibición de los toros en Cataluña, “el gobierno central ha actuado de forma improcedente”. Improcedente y contradictoria, pues, a su juicio, “no se puede entender cómo se niegan al blindaje de los toros, como sí se ha hecho con los ‘correbous’, y luego pasan la Fiesta a Cultura”.
Álvarez del Manzano se ha referido a la prohibición de los toros en Cataluña como una medida con la que “han querido encontrar un factor de diferenciación con el resto de España” y ha entonado el ‘mea culpa’ en primera persona: “Los taurinos, muchas veces, consentimos cosas que perjudican a la Fiesta”. “No soy partidario de echar la culpa a los demás, hay que hacer las cosas bien”, ha añadido, para después insistir en que “si no hay ética en el empresario, en el ganadero, en el profesional del toreo, estamos haciendo mucho daño a la fiesta del toreo”.
