GALERÍA FOTOGRÁFICA DE RODRIGO URREGO B.
Fotos: RODRIGO URREGO B.
Diego Ventura y Morante, una de las estrellas de su cuadra, salvaron de un mal final la tarde en Manizales. Sin ser una faena portentosa, sí mantuvo la verdad como impronta. Antes, con Cigarrera y Ordóñez presentó las suertes más vistosas de su repertorio, banderillas al quiebro, espectaculares piruetas en la cara del toro para rematar las suertes, como antesala de una cátedra de bien torear a caballo y de doma al servicio del rejoneo. Lo demás lo puso la torería de Morante, protagonista como ninguno del punto de inflexión de la tarde. Un rejón que fulminó a Agrimensor fue la llave que abrió la puerta grande para el jinete sevillano. Precisamente el fallo con los rejones de muerte impidieron un triunfo mayor de Ventura, que domando impecablemente y toreando con Oro y Toronjo, abrió plaza con mucha clase.
Alejandro Talavante se estrelló con un segundo toro complicado, sin ritmo ni clase. Abrevió el extremeño, que con anterioridad se lució con el percal. El quinto apuntó detalles de encastado peroun excesivo castigo en varas le pasó factura al toro. No se encontró a gusto Talavante que escuchó la bronca del respetable.
Sebastián Ritter no se entendió con el primero de su lote y vio cómo le sonaban los tres avisos y se la jugó con el sexto en una faena construida en la corta distancia.
Manizales (Colombia), jueves 7 de enero de 2016. Toros de Dosgutiérrez, bien presentados y complicados en general. Diego Ventura, silencio y dos orejas; Alejandro Talavante, silencio y bronca; Sebastián Ritter, pitos tras tres avisos y silencio tras aviso. Destacaron en banderillas Juan José Trujillo en el segundo y Carlos Garrido en el sexto. Entrada: Casi lleno.
