Por segundo año consecutivo Rivera Ordóñez “Paquirri” ha terminado su temporada pasando por el quirófano. La evolución de su reciente operación en la rodilla izquierda será la que tenga la última palabra para que Francisco vuelva a prepararse pronto con vistas a una temporada en la que cumplirá las bodas de plata de su debut en Ronda. Disfruta de cada tarde, de sus compañeros y del poso que le han dado los años, de ahí que no quiera ni pensar en la retirada. Su objetivo es torear para llenar el alma y seguir soñando con su profesión, tal y como asegura en el I Extra de matadores de esta semana.
El torero asegura que todavía se está recuperando de la fractura de costilla y de la lesión en la rodilla: “La costilla que me partió el toro en Villamayor de Santiago todavía me molesta porque fue una fractura por dos sitios. Aproveché que estaba fastidiado para operarme la rodilla, que la verdad es que hacía falta”.
Desde su vuelta a los ruedos en 2015 han bajado sus compromisos notablemente. “Ha bajado todo. Esas temporadas en que se toreaban cien corridas de toros es algo impensable hoy en día. La crisis ha hecho estragos y en el toro no iba a ser menos. Poco a poco también hay que ir seleccionando e ir a los sitios donde uno está a gusto”. Y es que la intención de Paquirri para el año que viene es “torear. Todavía tenemos que sentarnos y planear la temporada. Mi intención, en cuanto me recupere, es ponerme las pilas y comenzar a entrenar. Me gustaría hacer una temporada bonita e ir a muchas plazas”.
Aunque de forma temporal, sabe lo que es estar alejado de los ruedos. ¿Se imagina la retirada definitiva?, le preguntamos: “Sé que está cerca y en casa me la piden, pero ahora mismo no quiero pensar en ello”
