Juan Bautista: “Admiro a Fundi y Ponce, pero ese día habrá competencia”
Joubert: “Ni en sueños podía pedir este cartel”
Uno de los grandes atractivos de la Feria de Istres, sin duda el más inesperado, es la vuelta a los ruedos de El Fundi, que se mostraba emocionado tras la presentación de los carteles. “He sentido la simpatía, agrado, cariño, ilusión de la gente… me ha encantado venir a la presentación de los carteles, me ha motivado más si cabe, pero también me ha llenado más de responsabilidad. No pensaba que la presentación que la presentación iba a estar tan bien organizada e iba a recibir el cariño de tanta gente. Ha sido una sorpresa muy importante”.
El torero de Fuenlabrada confiesa que le gustó la petición de la empresa para volver a los ruedos en Istres. “Cuando veía que algunos toreros toreaban corridas bonitas y agradables, pensaba que a mí me apetecería torearlas, así que me gustó mucho que me lo pidieran y además la manera que lo hicieron. Me hablaron de la afición de Istres y de Francia, que estaría feliz de verme en su plaza. No pude más que aceptar”, apostilla.
¿Vuelve para una sola corrida?, le preguntamos. “Yo vuelvo para una corrida, lo que ocurre es que después tiene que salir el toro. Si me veo bien, el público me ve bien y hay ofertas similares a ésta, no digo que no. Pero no quiero aventurar nada hasta que no me vea delante del toro y el público me vea. De momento, una tarde”, asegura. Para ello ya ha empezado a prepararse porque confiesa que para él “no será una corrida más. Merece la pena el esfuerzo y la preparación para que sea un triunfo”.
Se da la circunstancia de que será la segunda vez en su carrera que toreará con Ponce y también la segunda que estoqueará una corrida de Juan Pedro. “Yo pensaba que con Ponce había coincidido más, pero solo ha sido en una corrida anteriormente. Siempre es agradable torear con toreros de la talla de Enrique y de Juan”, afirma El Fundi. Sobre la corrida expone: “La primera vez que toreé una de Juan Pedro fue la tarde de mi despedida y ahora otra vez en mi regreso. Son unas corridas que estaban un poco alejadas de mí cuando toreaba porque estaba metido en la vorágine de las otras corridas”.
Asegura que recuerda perfectamente su última tarde en El Palio: “Fue con una corrida de Victorino Martín, lo recuerdo muy bien. Pude cuajar un toro con la izquierda, cortarle las orejas y saborear el triunfo y el calor de esta plaza”. Una afición francesa que le admira y respeta. “Aquí me siento querido y arropado. Me siento torero”, concluye.
