LA FUERZA DE LA SANGRE (II)
Licenciado, de AlcurrucénLicenciado, de Alcurrucén

Licenciado en bravura

Nuestro director, José Luis Benlloch, analiza de la mano del ganadero José Luis Lozano la reata y el juego del excelente toro de Alcurrucén lidiado por El Juli en el último San Isidro, hermano de padre y madre del no menos célebre Licenciado estoqueado por Juan del Álamo en el abono madrileño del pasado año. Esta es su historia...
José Luis Benlloch
lunes 18 de junio de 2018

San Isidro 2018 se ha caracterizado por la aparición de grandes toros, toros puntuales que por sí solos han sido un gran espectáculo, ejemplares que por su comportamiento merecen tiempo de tertulias de invierno. De ellos y de sus reatas trata esta sección surgida a su medida. La semana pasada hablamos del Hechizo de Fuente Ymbro y su estirpe o reata, dicho en términos camperos, y esta continuamos con Licenciado de Alcurrucén. Cuadro de honor en el que la realidad nos lleva de domecq a núñez, la variedad de encastes que tanto se reclama con la particularidad de que el recorrido no se acaba ahí. Habrá más.

José Luis Lozano, copropietario de Alcurrucén, hombre avezado en estos trances triunfales, no cabe de gozo. San Isidro es como su feria, y este año, una vez más, ha vuelto a situar un toro de la casa entre los mejores. Y casualidad o no, la estrella vuelve a llamarse Licenciado.

-Por hechuras, el toro era una maravilla. Diría que era el toro perfecto para una plaza como Madrid. Muy bajo. Colorado, lo que le daba mucha vistosidad. Serio pero bien formado de cara. Con quinientos treinta kilos, creo recordar, que es un peso bueno para que se pueda mover un toro. De hechuras no podía ser más bonito.

-¿Esperabas lo que fue?
-¡Hombre… las notas nos hacían ser optimistas! La madre, Licenciada, murió con veinte años y todos los productos que dio fueron de notable y sobresaliente. Además de este Licenciado, recuerdo el Licenciado del año pasado, el de Juan del Álamo, y no me olvido del toro de la alternativa de David Mora en Borox, que fue de indulto… Otro Licenciado, hermano de padre y madre, está en las vacas y es precioso. Esa misma vaca madre dio, además con distintos sementales, siete u ocho hembras con una nota de tienta entre el ocho y el diez.

-Una vaca que ligue con sementales diferentes a ese nivel es una joya.
-¡Imagina…! Venía de una gran reata también. De la línea de las Profesoras, Doctoras, Académicas… y de un toro 63-Navajero. Es una pena que haya muerto de vieja. Por todo eso, el juego de Licenciado no ha sido una sorpresa. En esto no existe la seguridad total pero cuando tienen una reata buena tienen muchas posibilidades de serlo ellos y si además les acompañan unas buenas hechuras aumentan todavía más esas posibilidades.

-¿En casos así serías partidario de sacarles semen a los toros?
-Nosotros les hemos sacado semen a muchos toros pero no somos muy partidarios. Si un toro ha tenido una vida normal, de quince o diecisiete años… y te ha dado muchos productos, hay que dejarlo ahí. En España el problema de la consanguinidad es grave y si guardas semen de un toro de esa categoría, teniendo la posibilidad de utilizarlo es muy tentador hacerlo y por ese camino corres el riesgo de llegar a la consanguinidad. En América estaba más justificada porque no tenían toros, no había importación y en esa situación la inseminación era vital, pero aquí en España no tenemos esa carencia. Te diré más.

“Por hechuras era una maravilla. El toro perfecto para Madrid. Muy bajo. Colorado, lo que le daba mucha vistosidad. Serio pero bien formado de cara. Con 530 kilos… No podía ser más bonito”

-¿Sí?
-Hay ganaderías que se han ido al traste por la consanguinidad. Las caídas en muchos casos eran consecuencia de la consanguinidad, que trae también abortos y otros muchos problemas… El método de la inseminación, por tanto, ofrece riesgos. De todas maneras nosotros tenemos semen de bastantes sementales buenos por si acaso…

-En cambio hay quien la defiende.
-Sí, pero para fijar caracteres, solo hasta determinado porcentaje que no se sabe cuál es. Esa es la incógnita y la explicación de por qué una ganadería de pronto se ha venido abajo con el mismo dueño, el mismo método y las mismas vacas. Es la señal de que ha sobrepasado el porcentaje. Es tan grave y tan determinante que cuando te alcanza, si no lo coges a tiempo, no tiene solución, hay que matarlo todo. Hay muchos nombres muy sonoros, históricos, que la han sufrido. Por todo eso no conviene abusar de los mismos toros.

-Entiendo que en el caso de Licenciado no existe ese por si acaso al que te refieres, esa línea parece muy asegurada.
-Totalmente. Un hermano de padre y madre como te he dicho está en las vacas actualmente. Tiene un año más que el Licenciado de Juli, que era cuatreño, y un año menos que tendría el Licenciado de Del Álamo, que se lidió de cinqueño. El año que viene le veremos productos. No está tentado, lo echamos por nota después de ver lo que daba su madre. Le pusimos veinticinco o treinta vacas y estamos expectantes.

-No me has hablado del padre de Licenciado.
-Era el 96-Chalán. Murió también. De viejo. Daba muy encastado. Solo tuvo un problema, daba más toros de plaza de segunda y tercera que de primera.

-¿Importancia de los sementales?
-Muchísima. Un ganadería se va para arriba o para abajo dependiendo de los sementales. Si das con dos o tres sementales que liguen bien se va para arriba como una moto. Las vacas también son importantes, dan la regularidad pero cualquier ganadero bueno siempre tiene una tropa de vacas buenas y de buena reata, así que lo decisivo es dar con el buen semental.

“Comparado con el Licenciado del año pasado me quedo con este. Ha sido más completo, más profundo y repetía más, tuvo más continuidad y diría que más humillación también”

-El tema es apasionante.
-Te digo más, aparte de que transmita comportamiento un semental es importantísimo que fije el tipo. Los tipos son algo a tener muy en cuenta. A veces no dan bonito o dan para plazas de segunda y tercera y eso está bien pero lo relativiza todo. Hay que buscar sementales completos, que den buenos productos, con buenas hechuras y para plazas de primera.

-Comparemos este Licenciado con el del año pasado.
-Me quedo con este, más completo. Ha sido más profundo y repetía más, tuvo más continuidad y diría que más humillación también.

-¿Qué tienen los Licenciado de los núñez antiguos?
-Todo o mucho. Viene de una vaca que entró en la compra a los Núñez, se llamaba Letrista, número 32, con el hierro de Rincón, que dio muchos y buenos productos. Los Núñez tenían la ganadería ordenada por profesiones y de los Letristas eran los Doctores, Licenciadas, Académicas… Es una línea muy encastada.

-¿Y en su conjunto los núñez de Alcurrucén qué tienen de más que los núñez del viejo don Carlos?
-No sé… te diría que los tipos han mejorado una barbaridad. El toro de Núñez era un toro bonito pero en aquellos años había muchas desigualdades y en ese aspecto el toro de hoy día es modélico. En la corrida del otro día se apreciaba perfectamente en los corrales, los dos de núñez por un lado y los otros cuatro, de Victoriano y de Justo, por otro, estos muy iguales entre ellos, todos muy en sus respectivas líneas y todos por encima de los quinientos kilos. Nunca, en ninguna época, se han presentado los toros así.

-Pues escuchadas a las autoridades no parece que sea como dices ¿Crees que hay desconocimiento a la hora de reconocer las corridas de toros?
-Mucho.

-¿Tú crees en las reatas?
-Desde luego. Hay que observar y estudiarlas constantemente, siempre te dan información válida.

“El mejor toro que he visto jamás es Jabatillo, el de Castella. Los habrá habido con más calidad, el Pelucón de Ponce en Bilbao por ejemplo, pero como Jabatillo, imposible. ¡Cómo repetía!”

Naturalmente Alcurrucén no es solamente la familia de los Licenciados, Doctores, Académicos… hay otras familias ilustres, la de los Músicos mismamente, que da mucha clase, y lo mismo ocurre con la de los Rompepuertas, Rompesurcos, Rompelindes, Rompeolas… y entre otras destacadas están los Cumbres, Cumbrerrojas, Cumbreblancas… los Corredores, Correrríos, Corresoles, Correlunas…

-Te voy a recordar otra familia estupenda que venía de una vaca de la línea de villamarta, que son los Afanosos… Da muy encastado. Les queda muy poco de Villamarta porque a las veintitantas vacas que vinieron de esa línea les fuimos echando toros de Rincón y por absorción son Rincón al noventa y ocho por ciento aunque curiosamente mantienen cosas de los villamarta.

-¿Y los Barbero?
-Esos son rincón pero… los Barbazul, Barbarroja… tienen también origen villamarta. Ha habido la misma absorción de rincón que te comento de los Afanosos pero han mantenido el nombre.

-¿Para el año que viene hay algún Licenciado?
-De padre y madre machos no. Sí se ha tentado una vaca este año que ha dado muy bien.

A pesar de la gloria de los Licenciados y Académicos, José Luis no ha dudado cuando le he preguntado por el mejor toro que ha lidiado jamás.

-Jabatillo. El mejor toro que hemos lidiado es Jabatillo, el de Castella de hace tres San Isidro. Es más, te diría que en todos mis años de aficionado no he visto ningún otro mejor que ese de ninguna ganadería.

-¿Tanto?
-Sí. Tanto. Habrá habido toros con más calidad, con más clase, el Pelucón de Ponce en Bilbao por ejemplo, pero con ese comportamiento de Jabatillo, de embestir igual de principio a fin, es imposible. ¡Cómo repetía! y hasta en los doblones del final iba como en los primeros, con la misma humillación y con el rabo empinado. Puede salir otro con más calidad o igual de completo que ese, pero mejor no. Yo he visto varias veces el vídeo para encontrarle un defecto y no se lo encontré.

-No te lo voy a discutir. Por cierto, no hemos referido otra virtud de Licenciado, la buena suerte, encontrarse con quién se encontró.

-Es cierto, Juli estuvo extraordinario. Perfecto.

-Tampoco se discute.

Fotos: Javier Arroyo, Plaza 1 y archivo

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