A lo largo del comunicado, Toño Matilla explica las razones por las que finalizó la relación de apoderamiento entre él y Alejandro Talavante. Todo ocurrió el día 1 de junio en Granada. “Decidí concluir la relación profesional con Alejandro Talavante después de que me exigiera no un aumento de 15.000 euros en sus honorarios por cada actuación como se ha publicado en los últimos días, si no de que sus emolumentos se vieran incrementados hasta facturar “más que el que más”, argumentando que él era “el mejor, el número uno”.
El apoderado salmantino continúa diciendo que tras intentarlo “de forma fallida en alguna ocasión”, consideró que “no podía conseguir lo que él exigía y di por terminada la relación profesional que nos unía. No podía defraudarle ni a él ni a mí mismo. Modestamente pienso que “el número uno” ha de reflejarse en taquilla, y él no lo era”.
Asimismo, Toño Matilla muestra su satisfacción por haber ayudado a Alejandro Talavante en una etapa concreta de su vida: “La facturación del torero aumentó en un 44% de 2015 a 2017 -última temporada completa en la que trabajaron juntos-“.
