ENTREVISTA

Escribano: “Me ha quedado triunfar en las grandes plazas”

Raquel Barba
lunes 05 de noviembre de 2018

Son varios los factores que este año se han juntado en la temporada de Manuel Escribano para que no sea la que él esperaba: la lotería de los astados, el percance de Belmonte o la negativa de algunas plazas como Alicante, Bayona o Pamplona. Son, a su juicio, circunstancias a los que todos los toreros se enfrentan alguna vez y que ahora, a poco de entrar en la edad de “la niña bonita”, le ha tocado. Pero el sevillano rema a contracorriente para evitar, a toda costa, caer en esa espiral de la que algunos no pueden salir.

– ¿Cómo califica la temporada?

– Ha sido una temporada nada fácil porque dadas las circunstancias necesitaba del triunfo día a día. También he tenido la mala suerte de que los toros no me han dado opciones de ningún tipo ni para cuajar la faena ni para nada. Cuando eso se da, cuesta mucho trabajo y muchos sitios dejan de contar contigo. Esa es la realidad y es así de complicada en ese sentido.

– Hábleme sobre la tarde de Sevilla y los victorinos.

– Esa tarde tuvo cosas muy importantes para mí, el poner a la gente en pie a lo largo de la faena y, sobre todo, ese segundo toro, con la música en el capote y en banderillas, donde puse a los tendidos de nuevo en pie. Fue un toro fácil, al que le pude sacar unos muletazos muy buenos, pero ahí terminó todo, esa fue la pena. Fue una tarde muy bonita.

– ¿Qué la diferencia de la anterior?

– Sobre todo las opciones que tuve el año pasado y he tenido este. Yo me encuentro genial y veo que crezco cada temporada. Pero también es por el tipo de corridas que yo mato. Entonces te quedas con esa impotencia de querer dar más pero tienes que adecuarte a lo que tienes delante.

“Este año me han embestido muy pocos toros, pero los números no me preocupan”

– ¿Qué le ha quedado por hacer?

– Todos los años queda algo. Me ha quedado ese triunfo en las grandes plazas y sobre todo Madrid, que sigue siendo mi tarea pendiente porque al no tener opciones de nada me ha faltado mostrar allí cómo es de verdad mi toreo.

– Fue una sorpresa la ruptura con El Tato.

– Sí, fue una noticia sorprendente para todos. Nos teníamos que reunir y plantear la temporada siguiente, pero al final él no se veía con el ánimo de seguir en esto, está un poco cansado. Ahí terminó todo. Fue una pena pero así lo decidimos.

– ¿Hay alguien detrás de usted?

– Todavía no. No he tenido ningún tipo de reunión. Sí he pensado en algunas personas, pero todavía no tengo a nadie. Estoy pensándolo todo, lo que quiero y lo que no quiero.

– ¿Qué ha supuesto El Tato para su trayectoria?

– Me ha aportado muchísimo. Durante este tiempo se ha preocupado por todo. Día a día iba aprendiendo cosas que solo un torero con esas cualidades te puede enseñar.

– El percance de Belmonte nos dejó a todos impactados.

– Tuve mucha suerte porque no me tocó nada importante y al final se pudo solucionar porque hubo ahí un momento en el que si hubiese pasado algo serio habría tenido muy mala pinta. Pero por suerte lo solucionamos y en Albacete se encargaron de todo lo que en la plaza no fueron capaces de ver.

– Podría haber sido mucho peor…

– Sí, pero gracias a Dios todo salió bien.

– ¿Qué impacto tuvo el percance en tu temporada?

– Son cornadas. Perdí alrededor de cuatro corridas.

– ¿Cuál sería el contrapunto?

– Las buenas sensaciones, sobre todo en las plazas de primera, en las que he salido al cien por cien y he dejado mi dimensión como torero. Es esa entrega y esa verdad en el toreo que siempre quiero llevar a cabo.

“El Tato me ha aportado mucho. He aprendido cosas que solo un torero con sus cualidades te puede enseñar”

– Ha sido, sin duda, un año lleno de cambios, sorpresas, momentos difíciles…

– Totalmente. Son temporadas que vienen así. Siempre en la carrera de un torero hay momentos que vienen con dificultades ya de por sí, sin que hagas nada diferente. Son cosas que hay que pasar, sacando siempre lo positivo, pero ya está, sin más. Hay que seguir hacia delante.

– En la última actualización del escalafón se sitúa en el puesto 19, con 27 corridas y 29 orejas. ¿Es un hombre de números?

– Para mí los números no significan nada. Significan mucho más las sensaciones y los momentos, sobre todo los que he podido disfrutar en las plazas importantes. Este año me han embestido muy pocos toros y aunque he conseguido cortar orejas, he tenido momentos en los que no he podido hacer nada. Pero los números no me preocupan.

– El año que viene cumple 15 años de alternativa. ¿Tiene algo pensado?

– Nada, nada -ríe-. Por ahora todavía queda mucha temporada por delante y ojalá Dios quiera que pueda celebrar otro aniversario.

No baja la guardia

Entre las dificultades que ha encontrado a lo largo de esta temporada, Manuel Escribano destaca una: “Me habría gustado que me hubiesen respetado en Alicante, Bayona o Pamplona, sitios en los que yo creo que debía estar, en los que la gente me quiere ver y que significan mucho para mí”. Esta es una situación por la que muchos toreros pasan y que los han llevado incluso a tomar la dura decisión de apartarse de los ruedos, como ha sido el reciente caso de Alejandro Talavante. Es algo a lo que el sevillano no tarda en encontrar una explicación: “Esto sucede en ocasiones por los momentos que pasa cada uno. Aquí al final perdura y aguanta el que quiere y tiene ganas y afición para aguantar. Cada uno es libre de hacer lo que quiera y lo que le nazca en cada momento”.

Fotos: ARJONA

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