Fotos: ARJONA
La afición de Madrid obligó a saludar a El Cid tras el primer paseíllo de su despedida. Compartió la ovación con Emilio de Justo. El primero de Puerto de San Lorenzo resultó abanto de salida y en su conjunto. El Cid tuvo paciencia con él. Le consintió mucho con el capote. Algunas verónicas del quite fueron para enmarcar por su temple. Muy metido El Cid desde el inicio. El del Puerto continuó mansito aunque con humillación en el embroque. El Cid aprovechó esa virtud las dos tandas que duró. Un par de naturales recordaron al Cid de los mejores tiempos. La estocada quedó perpendicular en lo alto.
El segundo de El Puerto estuvo bien presentado. Engatillado de pitones, más cuajado que su hermano. Un inspirado Emilio de Justo lo recibió genuflexo por verónicas. La ortodoxia ordoñista desembocó en una fuerte ovación. Lo llevó al caballo con chicuelinas al paso y quitó después por gaoneras. El toro derribó de forma espectacular a Mario Benito. Muy acertada brega a cargo de Mambrú. Saludó Morenito de Arlés tras un espectacular tercio de banderillas. El inicio muletero fue poderoso. El del Puerto comenzó a quedarse corto demasiado pronto. La calidad apuntada en el saludo con el capote se tornó brusquedad. Emilio de Justo, en momento de gracia, mostró seguridad y oficio. Extrajo derechazos con mucho mérito. En un parón del toro aguantó el extremeño con estoicismo. Media estocada y un descabello.
El tercero lució el hierro de Victorino Martín. Serio y astifino. Probó en el capote pero El Cid lo guió con poder. En el caballo de Espartaco, que le recetó un buen puyazo, empujó con fuerza aunque salió suelto barbeando las tablas. Brindó al presidente de VOX, Santiago Abascal que presenció la corrida junto a Morante de la Puebla y Sánchez Dragó. El victorino rompió en bravo; muy humillado, codicioso, con transmisión. Tuvo la lógica complejidad de la casta de reponer rápido, volverse sobre las manos. Una tanda sobre la derecha fue un pulso que ganó El Cid. Con la izquierda no se entendieron tan bien. En el regreso a la diestra estalló la faena. Se sucedieron varias tandas con derechazos sublimes, con temple, empaque y largura. Dos inoportunos desarmes bajaron la intensidad de la faena. Estocada desprendida. Saludos tras petición y aviso. Ovación en el arrastre al victorino.
El cinqueño que hizo cuarto fue fino y serio en su abierta cara. Lo paró Emilio de Justo con facilidad. El mayoral de Victorino fue el encargado de picarlo en un duro puyazo primero, medido el segundo. Emilio de Justo hizo un esfuerzo grande con el toro, reservón y duro. No regaló una embestida por derecho. De Justo apostó hasta lograr una tanda de naturales sensacional. Se escapó de milagro en un volteretón durísimo una de las veces que se quedó por debajo. La determinación del extremeño le situó por encima de la exigencia del victorino. Con la espada estropeó la gran labor ofrecida.
El quinto, de Parladé, colocado de pitones, cuesta arriba en su cuajada hechura. Pasó inadvertido en los primeros tercios, aun así, El Cid brindó al público. La primera tanda, en los medios, tuvo emoción por el galope del parladé. Se acabó la movilidad y la faena resultó monótona. El toro obedeció sin clase ni transmisión. Estocada.
El toro más hondo y serio de la tarde fue el sexto de Parladé. Emilio de Justo lo recibió pausado con el capote. En banderillas de vino arriba el toro tras una costalada en el quite. Emilio de Justo lo brindó al público en el arranque de la temporada más importante de su carrera. Rompió el de Parladé a embestir ante la seguridad del extremeño que no le dio otra opción. Hubo dos tandas sobre la derecha además de otra sobre la izquierda preñadas de temple y profundidad. Los pases de pecho fueron carteles de toros. Humillado y entregado el parladé, con ritmo. El final de frente y pies juntos sobre la izquierda fue extraordinario. Estocada. Ovacionado el toro en el arrastre.
Madrid. Palacio de Vistalegre. Sábado 23 de febrero de 2019. Toros de Puerto de San Lorenzo (1º y 2º) correctos de presentación de juego irregular; Victorino Martín (3º y 4º) bien presentados, bravo el tercero y reservón el cuarto; y Parladé (5º y 6º) bien presentados. Soso el quinto y enclasado el buen sexto. El Cid, silencio, ovación tras petición y aviso y ovación; Emilio de Justo, ovación, ovación tras aviso y dos orejas. Entrada: Media plaza. Incidencias: Tras el paseíllo, El Cid compartió ovación con Emilio de Justo. Saludó Morenito de Arlés tras parear al segundo. Al finalizar el festejo, Victorino Martín recibió el trofeo al major toro del desafío ganadero.
