Fotos: ARJONA
Volvió Paco Ureña. Y Valencia respondió. La plaza en la que es un auténtico ídolo se llenó para su regreso tras el infortunio de Albacete. No merecía menos el murciano. Rosa palo y oro el terno. Apenas se deshizo el paseíllo, la afición le tributó una ovación de gala, de las que se recordarán para siempre por su emotividad y significado. Los sentimientos a flor de piel. Compartió con Ponce el momento, que minutos después le brindó su primera faena. El respeto y los valores del toreo. Lo dicho, volvió Paco Ureña.