El francés se gustó en la faena a su segundo y perdió un posible trofeo por la mala colocación de la espada. Por su aprte, López Rivera y Aldo Orozco, fueron silenciados.
VEA EL VÍDEO RESUMEN DEL FESTEJO
Juan Bautista: "He tenido sensaciones muy bonitas"
Hermoso triunfa en Motul (México)
El que abrió plaza fue un ejemplar muy deslucido de Villacarmela. Juan Bautista anduvo firme y queriendo ante la brusquedad del animal que en todo momento embistió con la cara alta y muy rebrincado. El francés, muy por encima de su oponente, lo finiquitó de una gran estocada. Su segundo fue también un toro serio, hondo y bien rematado, que además, tuvo buena condición y temple en su embestida, aunque le faltó algo de continuidad. Lo entendió muy bien Juan Bautista, que poco a poco lo fue metiendo en la muleta y subiendo el tono de la faena. Al natural dibujó los momentos de mayor despaciosidad. Estuvo muy por encima de las posibilidades del toro. La lástima fue que la espada cayera desprendida y ese fue el motivo por el que el presidente desatendió una fuerte petición de oreja.
López Rivera peleó con el encastado y enrazado que hizo segundo. El azteca no se acopló frente a un toro que transmitía importancia en su embestida. Con el quinto, estuvo más animoso y voluntarioso en una faena en una faena variada. Tras fallar reiteradamente con la espada y el descabello, su labor quedó silenciada.
Por su parte, Aldo Orozco no se confió con el tercero, un toro que tuvo opciones, mientras que con el que cerró plaza realizó una faena de excesivo metraje frente a un toro que nunca se empleó.
México, domingo 27 de febrero de 2011. Toros de Villacarmela. JUAN BAUTISTA: Ovación y vuelta al ruedo; LÓPEZ RIVERA: Silencio y silencio tras aviso; ALDO OROZCO: Silencio en ambos. Entrada: 4.500 espectadores.
(Foto: Tadeo Alcina)
