Fotos: ARJONA
Santiago Domecq Bohórquez llevaba muchos años postergando la posibilidad de ir a Sevilla con sus toros. El respeto que sentía, y siente, por el Coso del Baratillo refrenaban su deseo de estrenarse como ganadero a orillas del Guadalquivir. Al final ha decidido hacerlo este año entre otros motivos para no privar de ese gusto a sus hijos, a su familia, bastión en el que se sustenta su fe como ganadero. Estas son las declaraciones a pie de campo de un hombre comprometido con el reto que enfrentará es jueves.
Santiago Domecq nos confiesa cómo está viviendo estos días previos a la inminente cita: “Con toda sinceridad, con mucha preocupación por el respeto y la responsabilidad que supone lidiar en una plaza como La Maestranza, y no lo digo por hacer de menos a las otras, pero La Maestranza es lo que es y no lo voy a descubrir ahora”. Preocupación y respeto. Han leído bien. Y lo dice un hombre que lleva tres décadas al frente de su ganadería. En estos treinta y seis años que van desde que en 1983 comprasen la actual divisa nunca los astados de Garcisobaco han pisado el dorado albero maestrante. Santiago nos lo explica: “Había tenido oportunidades de hacerlo porque la empresa de Sevilla me había pedido una corrida en distintos momentos, pero siempre me ha dado mucho respeto lidiar en La Maestranza y les decía que no tenía. Ellos sabían que la tenía porque luego lidiaba en otros sitios. Incluso me llegaron a decir en tono distendido: mira, si alguna vez quieres lidiar nos avisas. Que no ha sido el caso, todo hay que decirlo”, matiza. ¿Qué es lo que ha cambiado esta vez para dar ese paso?, preguntamos: “Porque uno va cumpliendo años, mis hijos tienen también ya una edad, y muchísima afición, y no les quería privar de ese gusto que es lidiar en esta plaza”, responde con sinceridad.
Sobre la corrida que envía a la Maestranza, el criador señala: “Está en el tipo de lo que siempre he considerado el toro de Sevilla, a priori se ha intentado reseñar una corrida muy en lo que yo he mamado que tiene que ser una corrida para La Maestranza”. Nos interesamos por familias y reatas: “Va abierta de sementales. Pero luego nunca se sabe. Estamos en manos del de arriba que es el que tiene la llave de cómo va a salir la corrida y a él nos invocamos”, comenta. Unos toros que ha preparado a conciencia: “Los hemos ejercitado como al resto de la camada. Con los años vas aprendiendo e innovando, pero todo esto es muy difícil porque son pruebas que vas haciendo de manera muy lenta. La corrida está bastante suelta, la hemos movido prácticamente desde que comenzó el otoño”.
Corrida en la que dos de sus toros serán estoqueados por El Cid. Aunque el torero de Salteras se despedirá de la que ha sido su afición más fiel en septiembre por San Miguel, la del próximo 9 de mayo será la última vez que luzca el chispeante en la feria sevillana. Lo que para Santiago, buen amigo del torero supone: “Más responsabilidad todavía. Si ya de por sí soy bastante exigente conmigo cuando lidio, en este caso con la tarde tan especial que es para Manuel Jesús, imagínese”, remarca. Junto a El Cid harán el paseíllo Miguel Ángel Perera y Paco Ureña.
Los toros reseñados para Sevilla:
Nº 33. Sacristán. Negro. Guarismo: 14
Nº 83. Destacado. Castaño. Guarismo: 14
Nº 25. Serreño. Negro. Guarismo 15
Nº 28. Libanés. Negro. Guarismo 15
Nº 31. Aperador. Colorado. Guarismo 15
Nº 36. Escondido. Negro. Guarismo 15
Nº 48. Remendito. Negro. Guarismo 15
Nº 54. Humorista. Negro. Guarismo 15
Nº 58. Madreselva. Negro. Guarismo 15
