El toreo vuelve a ganar una batalla en los despachos. En este caso, en Francia, donde el Consejo de Estado ha rechazado definitivamente la petición de las asociaciones antitaurinas que llevaron hace dos años a los tribunales administrativos de las regiones de Nimes y Beziers una propuesta para cerrar las escuelas taurinas al considerar que causa traumas a los alumnos y maltrato animal.
Tras una primera victoria judicial, los colectivos animalistas apelaron la decisión en la Corte Administrativa de Montpellier y Marsella, sufriendo en ambos casos una nueva derrota. Después de esta decisión, los antitaurinos llevaron el caso al Consejo de Estado, que este lunes ha fallado en favor de los toros al confirmar que no volverán a estudiar el caso ya que no hay argumentos que den a entender que las escuelas taurinas infrinjan la ley en cuanto a bienestar animal o causen algún tipo de trastorno en los alumnos.
La noticia llega en un momento propicio para el toreo en Francia, ya que esta misma semana, representantes del Observatorio Nacional de las Culturas Taurinas de Francia y la Unión de Ciudades Taurinas de Francia, se reunirán con el grupo parlamentario la República en Marcha, partido del presidente de la República de Francia, Emmanuel Macron, con el objetivo de zanjar la propuesta de una veintena de diputados de dicho partido que pedían prohibir la entrada a las plazas de toros a los menores de 16 años. A dicho encuentro, las entidades taurinas se presentarán con dos argumentos: la citada decisión del Consejo de Estado y la negativa a la propuesta de los ecologistas en la región de Occitanie -que se extiende de Vic Fezensac a Nimes pasando por Ceret y Beziers- que también quería impedir la entrada a los toros a los menores y que fue rechazada por una mayoría aplastante, con 114 votos en contra y 21 a favor.
