ENTREVISTA.- GUILLERMO HERMOSO DE MENDOZA

“No tengo nada en contra de Ventura, le admiro y me encantaría torear con él”

El joven rejoneador analiza en APLAUSOS la última temporada: "He notado crecimiento en aprender a andar por la plaza, en mover los caballos, en bregar con los toros malos, en muchos aspectos que el tiempo hace que te vayas rodando y te vayas curtiendo”
José Miguel Arruego
viernes 10 de enero de 2020

Ya no hay dudas. Si es que alguna vez las hubo, él mismo se ha encargado de disiparlas. Dos temporadas consecutivas asumiendo retos y saliendo victorioso de cada envite. En todas las plazas y en todos los países. Aquí y allá. En 2019 además experimentó la sensación de actuar sin el aliento y el consejo de su padre, y el resultado no pudo ser más elocuente. Guillermo Hermoso ya no es un proyecto, sino toda una realidad. Madrid y Pamplona le aguardan en este nuevo año para seguir escribiendo su propia historia.

El joven torero navarro ha hecho un receso en la temporada mexicana, y ha aprovechado las fiestas navideñas para regresar a nuestro país y disfrutar unos días junto a los suyos en la nieve, otra de sus pasiones. Y es aquí donde reflexiona sobre su última temporada, la más importante de su aún incipiente trayectoria.

-No sé si cuando empezó en la profesión tuvo dudas sobre su futuro como rejoneador, pero después de estas dos últimas temporadas, sobre todo la que finalizó hace unos meses, esa incertidumbre, en caso de que hubiera existido en algún momento, se habrá disipado por completo…

-Por mucho que sepas a qué quieres dedicarte, cada persona en su profesión, al principio, cuando empieza, tiene sus dudas. De saber si te va a gustar, no te va a gustar, si vales para ello de verdad… en realidad yo lo tuve claro desde el principio, pero ahora más después de cómo han salido las cosas en estas dos últimas temporadas. Digamos que si antes lo tenía claro, ahora lo tengo clarísimo.

-¿Fue más importante el año 2018 por ser el primero al máximo nivel o se queda con este último?

-La temporada 2018 ya fue muy importante, pero esta última ha sido más intensa si cabe, por la alternativa, en un lugar tan señalado y de tanta historia como La Maestranza de Sevilla, por la confirmación en nuestro país vecino Portugal, una afición tan entendida, en una noche que resultó mágica, por los triunfos de Salamanca, Logroño… de Francia, donde volví a cortar un rabo en Nimes por segundo año consecutivo…

“He notado crecimiento en aprender a andar por la plaza, en mover los caballos, en bregar con los toros malos, en muchos aspectos que el tiempo hace que te vayas rodando y te vayas curtiendo”

-Y de todas esas tardes ¿Cuál resulta más significativa para usted?

-Ha habido muchas tardes significativas, pero sobre todo me quedaría con la de la Feria de San Julián de Cuenca, porque era la segunda vez que me separaba absolutamente de mi padre. No estuvo en la corrida, ni viéndola, y para mí fue súper gratificante, el irme solo y ver que también era capaz de triunfar de esa manera, de cuajar un toro de Benítez Cubero, de cortar un rabo… ya no solo fue el hecho de triunfar sino la manera. Eso me llenó y reconfortó mucho también.

-¿Y cómo se vive un festejo sin el aliento y el consejo de la figura paterna?

-La primera fue en la Feria de la Vaquilla del Ángel de Teruel, que coincidió que mi padre estaba en Pamplona. El festejo se vive de forma diferente; cuando está él contigo, aunque esté toreando, te aconseja en un montón de cosas, en un montón de aspectos… Pero cuando estás solo, sientes que tienes que resolver tú, y eso te genera más incertidumbre, pero a la vez más independencia.

El brindis de Ventura en Juriquilla

Hace unos meses, en esta misma revista, Guillermo Hermoso ya dejó claro que él no tenía ningún problema con Diego Ventura: “Que mi padre y él tengan sus diferencias personales no implica que me tengan que afectar a mí, así que nos acabaremos viendo en las plazas”, explicaba entonces.
El pasado mes de noviembre en la plaza mexicana de Juriquilla, Diego Ventura le brindó un toro a Guillermo, un gesto que muchos interpretaron como un acercamiento. “Yo no tengo nada en contra de Diego -reitera el joven Hermoso- al revés, le admiro por su forma de torear, por lo que ha conseguido, y me encantaría competir y poder torear, con él y con cualquiera”.

-Y respecto a la cuadra… ¿tienen cada uno la suya propia aunque compartan algún caballo de vez en cuando, o se trata de una cuadra conjunta y usan los caballos indistintamente?

-Tenemos varios caballos exclusivos de cada cuadra, caballos que montamos y preparamos cada uno, y luego tenemos otros caballos que denominamos comodines, por así decirlo, como es el caso de Disparate para el tercio de banderillas o de Pirata en el último tercio, porque los usamos indistintamente uno y otro.

“Soy optimista respecto al futuro. Creo que hay figuras muy consolidadas y junto a ellas vienen jóvenes con muchas cualidades”

-Hablando de nombres… ¿cuáles son novedades y cuáles serán protagonistas en la suya la campaña próxima?

-Tenemos algunos que ya debutaron este año, pero que se están rematando muy bien, como Índico o Judío, ambos del tercio de banderillas, que tienen muy buena pinta. Después tenemos varios jóvenes que también apuntan muy alto, uno debutó en México de salida, Luso se llama, con la idea de que se rueden allí, y lleguen a España para afrontar la temporada mucho más curtidos.

-De los retos que aún le faltan por asumir, como la confirmación en la plaza de Las Ventas de Madrid o la presentación en la Feria de San Fermín de Pamplona, ¿cuál le inquieta o ilusiona más?

-Las dos, porque al fin y al cabo Madrid es la primera plaza del mundo, la más importante del toreo, pero Pamplona es mi tierra, y es igual de importante para mí o más porque es mi casa.

“De todo el año me quedaría con la tarde de Cuenca, porque era la segunda vez que me separaba absolutamente de mi padre. No estuvo en la corrida, ni viéndola, y para mí fue súper gratificante, el irme solo y ver que también era capaz de triunfar de esa manera y cortar un rabo”

-¿Le veremos en 2020 en ambas plazas?

-Todavía no tengo ni idea de cómo será el planteamiento de la temporada, pero ojalá, a mí me encantaría. ¿Que si me siento capacitado?, tampoco creo que haya toreado mucho pero sí, me siento en condiciones de afrontarlo.

-¿En qué ha notado más crecimiento y en qué debe incidir más?

-He notado crecimiento en aprender a andar por la plaza, en mover los caballos, en bregar con los toros malos, en muchos aspectos que el tiempo hace que te vayas rodando y te vayas curtiendo. Y en cuanto a cosas a mejorar, debo montar más, debo hacer más hincapié en cuestiones como la doma, cosas básicas para el futuro, son cuestiones muy importantes para poder prosperar y mantener todo.

-¿Con qué caballos se compenetra más?

-Con Pirata y Disparate, sobre todo. Disfruto mucho montándolos. Y luego está Barrabás, un caballo que uso de salida, que me regaló mi padre de potro y lo empecé a domar y montar yo desde entonces, y es como mi consentido.

-¿Los caballos notan cuándo los monta usted y cuándo los monta su padre?

-Sí lo notan, por supuesto. Al final yo intento aprender de mi padre, pero lógicamente aún me queda camino por recorrer y noto que hay veces que los caballos cuando los monto no responden igual y se tiene que subir mi padre para corregirles algunos defectos que tienen.

-Vamos a hablar del toro. Los matadores de a pie hablan de que el toro mexicano les aporta, sobre todo, temple. ¿Y a un rejoneador qué le aporta el toro de México? ¿Qué le aporta a usted?

El toro mexicano te aporta muchísimo, pero también tiene otras características para el rejoneo. Son un poquito más complicados, suelen esperar un poco más, no tienen la prontitud del toro europeo, el de murube, sobre todo, piensa un poquito más y para matar también es más complicado, porque en ocasiones se pone más por delante. Es un toro que aprende y el de murube no tanto.

-¿Y el toro en Portugal? ¿Arrea tanto como dicen?

En Portugal la lidia es más intensa, sin tiempos muertos. Quizá sea una lidia más emocionante porque se trata más de una pelea de tú a tú, de una lucha de poder a poder.

-Para concluir, ¿cómo ve el futuro del rejoneo?

Soy optimista al respecto. Creo que hay figuras muy consolidadas y junto a ellas vienen jóvenes con muchas cualidades, que están andando muy bien delante de los toros y eso es muy necesario para refrescar.

El doblete de Disparate y Pirata

Fue el pasado 6 de julio. En las plazas de Pamplona y Teruel. Ese día los protagonistas no fueron ni Pablo ni Guillermo, sino dos monturas que torearon en ambas plazas, en la vieja Iruña con el maestro Pablo y en la ciudad aragonesa con su vástago. Se trata de dos de los referentes de la cuadra, Disparate y Pirata, que triunfaron con el patriarca por la tarde en San Fermín y contribuyeron por la noche al triunfo del joven Guillermo en Teruel.
“Fue mi tío Juan Andrés quien los llevó de Pamplona a Teruel -explica Guillermo Hermoso de Mendoza-. La corrida era nocturna, y llegaron justo cuando me tocaba torear a mí, en el momento que iba a lidiar mi primer toro de Jódar y Ruchena. Llegaron, fui al patio de caballos y les estaban poniendo las monturas. Llegaron súper apurados pero al final conseguí torear con ellos y además triunfar, pues corté tres orejas”.

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