El campo bravo francés, en el que pastan cerca de medio centenar de ganaderías, también está sufriendo con fuerza la crisis provocada por la pandemia del coronavirus. Tanto es así, que Robert Menard, alcalde de Béziers y vicepresidente de la UVTF (Unión de Villas Taurinas de Francia), ha enviado una carta a Carole Delga, presidenta de la región de Occitania, reclamándole un plan de apoyo para los criadores de toros y caballos de la Camarga.
Menard señala que estas ganaderías extensivas desempeñan un papel fundamental en la protección de ecosistemas frágiles como los de la Camarga, en los cuales son garantes de la biodiversidad, además de ser un elemento dinamizador de las zonas rurales.
En la carta recuerda que estas ganaderías están atravesando un duro momento, puesto que si finalmente se cancela la temporada podría quedar el año sin ingresos.
Por todo ello, el apoyo a las ganaderías es fundamental para evitar un desastre ecológico en la región, además del económico y social.