El ministro de Cultura señor Uribes se debe sentar cuanto antes con los representantes del mundo de los toros para escuchar sus propuestas encaminadas a reiniciar la temporada cortada en seco a partir de la Feria de Olivenza por una razón de fuerza mayor como el Covid-19. Y exponer él las suyas si es que las tiene, porque hasta ahora tal parece como si en su agenda no figurara el toreo ni sus circunstancias. Uribes al tomar posesión de su cargo se precipitó a declarar que no era aficionado. Y está en su perfecto derecho. Pero dado que la Fiesta Nacional forma parte de su cartera ministerial no está legitimado para meter la cabeza debajo del ala como si esta no existiera.
Se da la circunstancia de que el toreo existe y es materia importante para muchos millones de españoles y también para profesionales como ganaderos, toreros, empresarios, médicos, veterinarios, mozos de espadas, sastres, transportistas y una buena cantidad de hombres y mujeres de cuyo trabajo depende el funcionamiento de la Fiesta y su supervivencia. Esa realidad obliga al ministro a dar la cara, y pensar también en el futuro inmediato, y a medio y largo plazo, del negocio que mueve la celebración de corridas de toros y novilladas, así como la cría del toro bravo en el campo, de norte a sur de la península ibérica. Quizás el señor ministro no se haya parado a pensar en todo lo que, le guste o no, saldrá beneficiado o perjudicado con sus decisiones. Pero lo que realmente resultaría negativo es su inanidad, su mirar para otro lado, a la hora de tomar medidas lógicas y bien sopesadas para que la Fiesta siga.
Medidas que deben ser adoptadas entre todos quienes forman parte del mundo del toro y también del máximo representante del Gobierno. No vale eludir responsabilidades ni tratar de salir del paso con inventos como el de los “nueve metros cuadrados”. Para hacernos reír ya tenemos a Mota y varios artistas más que lo hacen mejor que el señor Uribe y todos sus compañeros de Gabinete. O a mí me lo parece…
NOTA.- Celebrado el Consejo de Ministros de este martes, el ministro sigue sin decir ni mu de los toros.
