La novillada veragüeña de Javier Gallego abrió la franco catalana feria de Ceret. Y no se lo puso fácil a los novilleros, que se toparon con las dificultades de unos ejemplares que sacaron bravura a veces, genio y hasta no muy buenas ideas.
Sergio Flores pudo comprobar en sus carnes las dificultades de la novillada, ya que fue cogido por su segundo ejemplar, con sentido, mientras lo toreaba de muleta con decisión. Pero el joven desistió de visitar la enfermería y se quedó ens el ruedo para matar al novillo. Su valentía y vergüenza torera le valieron cortar la única oreja de la tarde. Dio una vuelta al ruedo en su segundo, ante el que se mostró con ganas y queriendo. Pero el novillo no se lo puso fácil, ya que, flojo de remos, se puso muy a la defensiva y nunca rompió.
Mario Alcalde, muy hecho en esta ganadería, fue sacando con sacacorchos los muletazos, sobre todo por el pitón izquierdo, a su primero, el segundo de la tarde, que se paró por acusar un largo tercio de varas. Hasta cuatro veces acudió el de Gallego al caballo, con empuje y decisión. El cuarto fue un ejemplar muy agarrado al piso, sin entrega ni voluntad de tomar con buen son los engaños. Digno estuvo Alcalde con él y al final dio una meritoria vuelta al ruedo.
El picador de la cuadrilla de Mario Alcalde, José Bernal, fue premiado por el buen tercio de varas que protagonizó al segundo novillo de la tarde.
Sábado 10. Cuatro novillos de Javier Gallego, bien presentados y de juego dispar. Todos de pelo jabonero. SERGIO FLORES: Vuelta al ruedo y oreja; MARIO ALCALDE: Saludos y vuelta al ruedo. Entrada: Media plaza.
