Orejas para Ponce y Marín en el primer festejo de feria en Córdoba

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Fotos: ARJONA

Abrió la corrida un toro que mostró desde su salida de chiqueros una invalidez alarmante. No fue protestado por el público cordobés a pesar de sus continuas caídas como tampoco destacó en las dos varas que recibió, peleando sin entrega. Faena de Ponce cuidando al toro donde poco pudo hacer el diestro valenciano ante un animal que se pasó la faena doblando las manos. Remató de pinchazo y estocada. Silencio.

El segundo derrotó de salida contra un burladero y al lancearlo El Juli se partió el pitón derecho devolviéndose. En su lugar saltó un bonito toro del hierro de Virgen María, acucharado de cuerna, que fue noble, obediente a los toques y muy humillador. Derrotó al final de los muletazos al principio pero se corrigió en la faena. Dos varas tomó sin apenas castigo y brilló en el quite Ginés Marín, precioso quite, a la verónica. Faena inteligente y poderosa de El Juli, con tandas buenas por ambos pitones aunque el cenit fue una tanda con la izquierda enorme de mando, temple y dominio. Malogró la faena con la espada al cobrar dos pinchazos y una estocada. Ovación y saludos.

De perfectas hechuras fue el tercero, bajo y tocado de pitones, al que Gnés Marín toreó con gusto de capote por lances a la verónicay chicuelinas. Dos varas de castigo en el caballo hicieron que el toro además, llegara muy noble a la muleta aunque con muy poco empuje. Estructuró Marín una faena que comenzó a media altura para bajar la mano en las tandas siguientes llevándose al toro a la cadera. Tandas por ambos pitones que el toro acusó al final, quedando muy aplomado. Las bernadinas finales despertaron un clamor en en tendido. Buena estocada y una oreja.

Otro toro bien rematado y de bonitas hechuras fue el cuarto. Noble y dócil pero muy justo de fuerzas, Ponce comenzó la faena a media altura con muletazos muy suaves para afianzar al toro. Las primeras tandas con la izquierda fueron templadas al ritmo de un toro de embestida cansina pero nobilísima, ligando el valenciano muy bien los de pecho. Firmó una tanda de naturales muy reunido, siendo lo más intenso de su labor. Los genuflexos finales despertaron también un clamor entre el público. Pinchazo, estocada y una oreja.

El quinto fue más alto y abierto de cuerna que tuvo poca clase y se apagó muy pronto. Ante él, El Juli lo intentó con un animal de poco recorrido y venido a menos. No hubo opción de lucimiento. Media estocada y tres descabellos. Silencio.

Noble pero inválido resultó el que cerró plaza y con él, Ginés Marín hizo un esfuerzo para firmar una labor de mérito pero que no transmitió emoción por la condición del toro. Media muy trasera. Ovación.

Córdoba. Viernes 25 de mayo de 2018. Feria de la Salud. Cinco toros de Daniel Ruiz y uno, 2º bis, sobrero del hierro de Virgen María, correctos de presentación. El de Virgen María, noble y encastado. Los de Daniel Ruiz muy flojos. Nobles pero sin fuerzas resultaron el 3º y 4º; inválido el 1º; descastado el 5º y noble e inválido el 6º. Enrique Ponce, silencio y oreja; Julián López “El Juli”, ovación con saludos y silencio; Ginés Marín, oreja y ovación. Entrada: Media plaza. Se le entrega al final del paseíllo a Enrique Ponce la partitura de un pasodoble que se estrena en ese momento. Se rinde homenaje a Fernando Tortosa por los cincuenta años de su alternativa.

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