Tomás Campos paseó el primer trofeo de la tarde del utrero que abrió plaza. Realizó una faena templada, en la que sobresalieron algunos naturales y exprimió bien a su oponente, un novillo obediente, con clase y duración aunque algo falto de empuje. Tranquilo, sereno, centrado y con buen oficio, el extremeño arrancó bien el festejo.
Arnedo (La Rioja), 29 de septiembre de 2013. Novillos de Navalrosal para Tomás Campos, oreja; Curro de la Casa y Clemente.
