Andy Cartagena abrió la primera puerta grande de la Feria de San Isidro 2016. Lo hizo tras cortar dos orejas al cuarto de la tarde a base de buen oficio. Debió acompañarle a hombros Diego Ventura, que cuajó una gran tarde, destacando sobre todo la enorme faena al quinto, en el que ralentizó el toreo a lomos de Sueño, pero el palco se negó incomprensiblemente a darle la segunda oreja.
Fotos: JULIÁN LÓPEZ
Dos orejas paseó Andy Cartagena del cuarto de la tarde. El toro fue deslucido, rebrincado, sin fuerza ni empuje... a pesar de todo ello, la principal virtud de la faena del alicantino fue tapar todos esos defectos tirando de fondo de cuadra. Cartagena puso todo lo que no tenía el toro. Con Cupido toreó en la corta distancia, llegando mucho a los tendidos con los balancines. Espectacular con Humano. Faena de entrega absoluta del de Benidorm que culminó con un rejón fulminante. El primero de la tarde fue un buen toro pero que duró poco. Destacó la primera parte de la faena en la que tuvo movilidad, aunque embestía algo brusco. Brilló Andy Cartagena montando a Sol y Sombra, con el que abrió el embroque para ganar la acción al toro. Después, el toro se apagó y con él la faena.
Sensacional faena de Diego Ventura al quinto de la tarde. Delante tuvo un toro hondo y de buena condición. Con Sueño estuvo simplemente cumbre. Ritmo, temple, ligazón, despaciosidad... enorme. Hubo tres pares de banderillas de frente, sensacionales. La plaza puesta en pie. Faena con profundidad. Un pinchazo y un rejonazo. Le pidieron las dos orejas, pero el palco decidió no otorgar más que una incomprensiblemente. Ventura paseó el trofeo y dio dos vueltas al ruedo junto a Sueño. En su primero malogró con los aceros una faena que tuvo momentos magistrales. El toro tuvo clase y fijeza, aunque también querencia a tablas. Estuvo poderoso con Lambrusco y deslumbró con Nazarí. Enceló al toro al estribo dando dos vueltas al ruedo poniendo la plaza en pie. Faena muy ligada de Ventura. Asumió riesgos al clavar llegando a los tendidos. Con Ritz toreó con pureza. Pero pinchó en dos ocasiones.
Manzanares tuvo el peor lote. El tercero de la tarde fue un toro manso y distraído al que Manuel Manzanares lo toreó con pundonor. Destacó lidiando con Príncipe, pero el toro imposibilitó cualquier opción de triunfo. Silencio. Tampoco tuvo suerte Manzanares en el sexto, un toro deslucido y brusco. Se justificó el alicantino, sobre todo con Farruquito.
MADRID. Sábado, 7 de mayo de 2016. Segundo festejo de la Feria de San Isidro. Toros de María Guiomar Cortes de Moura, con volumen y cuajo. Tres toros buenos 1º, 2º y 5º. Uno aplomado, el 3º. Uno falto de fuerza, 4º Y deslucido el 6º. Andy Cartagena, silencio y dos orejas; Diego Ventura, silencio y oreja tras fuerte petición de la seguenda y dos vueltas al ruedo; Manuel Manzanares, silencio en ambos. Entrada: Tres cuartos de plaza.
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