El tercero fue un toro estrecho de sienes, tocado arriba de pitones. Algo suelto de carnes. Borja Jiménez lo lanceó a la verónica hasta los medios, respondió el toro desde el principio con definida humillación. En el caballo se dejó pegar sin espectacularidad. Perdió las manos en banderillas apuntando falta de fuerza pero manteniendo siempre la calidad. Jiménez se echó de rodillas en un inicio arrebatado pero sin imprimir prisa a las embestidas. Importante inicio para calentar. La faena fue cogiendo nivel en tandas cada vez más largas, exigiendo al toro por abajo pero sin tirones. Faena muy completa rematada con un trincherazo y un pase de la firma. Estocada desprendida. Oreja con fuerte petición de la segunda.
El sexto fue un jabonero sucio de 630 kilos. Muy desarrollado del tren delantero, con mucho pecho y morrillo. Rodilla en tierra lo recibió Borja Jiménez en un exigente saludo. El toro no se desplazó con generosidad en los sucesivos tercios. Sin embargo, en la muleta de Borja Jiménez hubo un momento de mucha emoción en el inicio de rodillas. Ante mayor exigencia mejor fue la humillación. Duró muy poco… pronto se puso a protestar calamocheando y muy rebrincado. Jiménez lo intentó por todos los medios pero ya no había opción. Bajonazo. Palmas de despedida.
El cuarto fue un toro muy serio, enseñaba las palas. Sebastián Castella salió a pararlo muy pronto. Hubo lances buenos rematados con una media. Bien lidiado por José Chacón que fue aplaudido por la brega. Sebastián Castella brindó al público para empezar con un inicio de vértigo por estatuarios muy ajustados. Tras una tanda con las derecha para palpar las buenas calidades del toro, Castella se rompió en series ligadas con ajuste y mucha verdad. El toro se entregó por abajo con vibración y nobleza. Un final explosivo dejándose llegar los pitones al pecho antes de dos finales más: otro arrimón y varios muletazos de mucha estética ya con el aviso sonado. Media estocada y tres descabellos. Vuelta al ruedo tras aviso.
El primero de Jandilla fue muy serio por delante y muy pesado. Se vino cruzado a Sebastián Castella en el primer capotazo por lo que tuvo que coger el olivo. Apuntó falta de fuerza. En la muleta resultó un toro descompuesto pero obediente. El francés inició el trasteo doblándose con él para imponerse. La faena fue larga, le costó encontrar limpieza y resultó en general fría. Estocada en la que sufrió un fuerte golpe a la altura del vientre de la que salió dolorido. Silencio.
El segundo de la tarde fue una pintura. Muy en el tipo y en la expresión de esta ganadería. Manzanares lo recogió con unos capotazos de tanteo antes de dos buenas verónicas que remató con una media. Bien cogido en lo alto por Paco María. En banderillas expusieron Trujillo y Cebadera. Lo cuidaron en una medida brega. Se pegó un volatín en el inicio de Manzanares. Aunque pareció lastimarse, el toro embistió con calidad especialmente por el izquierdo. Sin embargo, el matador de Alicante se empeñó en el derecho en dos tandas de tránsito. Por el izquierdo logró naturales de su cadencia, en una serie colosal que no repetiría en la faena. El toro se puso protestón, ya sin fuelle ni celo en la fase final. Pinchazo y estocada. Silencio.
El quinto se estrelló con un burladero por lo que se lesionó. El sobrero, del hierro titular, era más basto que el conjunto. Resultó un toro muy parado y desclasado que no permitió opciones de lucimiento a Manzanares. Estocada. Silencio.
Madrid. Jueves 5 de junio de 2025. Toros de Jandilla, 5º bis, serios y de importante juego en conjunto. Destacaron los bravos tercero y cuarto. Sebastián Castella, silencio y vuelta al ruedo tras aviso; José María Manzanares, silencio y silencio; y Borja Jiménez, oreja con fuerte petición de la segunda y palmas de despedida. Entrada: No Hay Billetes.