Roberto Domínguez y José Luis Moreno, dos de los apoderados de esta tarde, de Roca Rey y Manuel Escribano, respectivamente, acudieron este jueves al coloquio organizado por el Excelentísimo Club Taurino de Bilbao.
El torero vallisoletano habló largo y tendido de su poderdante y de la gran conexión que tiene con los tendidos: “Tiene una atracción de héroe, en esta sociedad en la que se han perdido muchos valores, los niños ven a Andrés de una manera especial. La atracción de Andrés es natural. En cualquier reunión interactúa con los niños y le ven como el héroe que es”. En este sentido, incidió en la juventud que se ve a diario en las plazas: “El futuro de la Fiesta pasa por los jóvenes. Por eso Cataluña hizo lo que hizo, primero acabó con la juventud y luego con los toros”.
Roberto Domínguez recordó la heroica tarde que protagonizó el peruano hace un año en Vista Alegre: “El año pasado tuvo mucho altavoz lo que hizo. Todo se aunó para que aquella entrega calara tan fuerte. Fue un punto de inflexión pero eso mismo lo hizo en otros muchos sitios. No me demostró nada más que lo que demuestra día a día”.
Preguntado por si Roca Rey sería figura en otra época, contestó: “Se hubiera adaptado a cualquier tiempo y a los gustos del público. Un día le preguntaron a Luis Miguel Dominguín con qué se torea. Y dijo: “Con el oído”. Los públicos pagan por verle y salen encantados, aunque al día siguiente a veces tienes que leer que lo que hace no es torear. Ladran, luego cabalgamos, me digo. Pero él es sensible y le afecta”.
José Luis Moreno, por su parte, explicó la relación que tiene con Escribano: “Lo que intento con Manuel es hacer lo que me hubiese gustado que hicieran conmigo. Estar al lado de él, saber en qué momento hay que animarle, en qué momento decirle qué cosas. El que marca la trayectoria es el propio torero, no un apoderado”.
Incidió en que “hoy es un día muy especial para él. Ha crecido en su tauromaquia y este tipo de corridas te dan otra vitola. Puede ser uno de los carteles más bonitos del año”.
Moreno fue preguntado por el llamado sistema y por cómo Escribano se ha quedado fuera de muchas ferias: “No me quejo del sistema. Con los bueyes que tenemos son con los que tenemos que arar. El mercado se ha achicado, hay figuras que son necesarias e imprescindibles. Y es complicado meter cabeza. Al ser más pequeño el mercado, comer de esa tarta es complejo”.
Por último, ambos reflexionaron sobre el futuro de la tauromaquia, si lo ven con optimismo o al contrario: “Desde que conozco este mundo es cuando más gente joven veo en la plaza. Tengo dudas de si seremos capaces en el toro de mantener esa llama viva. Deberíamos taurinizar la sociedad”, comentó Moreno.
Roberto, al respecto, dijo: “Se están reduciendo las corridas, los ganaderos están sufriendo con un aumento de costos muy grande. Ferias tan importantes como Valladolid se han reducido a la mitad. Ser optimista es estar fuera de la realidad. Hay que proteger a los toreros que arrastran gente. Este es un espectáculo en el que solo se vive de la taquilla. Y eso es terrible. No hay espectáculo que viva únicamente de la taquilla. No podemos sacar a la gente que va a las plazas”.
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