Román pone la emoción en Manizales; Arcila y Bolívar, las orejas

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Una buena corrida de toros trajo el ganadero Carlos Barbero a Manizales, y la terna, con intermitencias, no deslució en una tarde a la que le faltó un triunfo categórico. Como si hubieran dosificado la entrega los toreros y los toros, casi todas las faenas fueron de más a menos, excepto la del tercero en la que sucedió lo contrario.

Le pidieron la segunda oreja a José Arcila por su actuación en el quinto, ante un toro con calidad pero poca fuerza. Las primeras series tuvieron firmeza y reposo, quizá más del debido porque faltó rematar las suertes. Pasada la tercera serie, José tuvo que atacarlo con más intensidad para que no huyera. Vinieron los altibajos, la sosería de parte y parte, y la remontada final. El espadazo convenció a los aficionados y con fuerza le pidieron las orejas, pero el presidente concedió justamente una de ellas.

Ante el segundo bis, porque el titular fue devuelto por aparente cojera, Arcila acortó demasiado las series, aunque hubo pases con hondura, y temple. Quedó la sensación de haber podido ser más dadivoso con el toro, y más generoso con el público, que cariñosamente lo sacó a saludar una ovación.

En el cuarto, Luis Bolívar, dio una gran dimensión, desde el poderosísimo inicio de faena con pases por alto, genuflexo, pasándose al toro muy cerca. El toro fue bravo y se rebosaba en la muleta de Bolívar, que lo enganchó adelante y lo remató atrás. Coincidió el comienzo de la música con el breve pasaje deslucido de la faena. Por el pitón izquierdo el toro no tuvo el mismo comportamiento y Bolívar también se enfrió un poco y enfrió al público. Regresó a la derecha para volver a mostrar que había toro para el triunfo. La estocada se fue un poco tendida, pero la larga primera parte de la faena estaba hecha y alcanzó para la merecida oreja.

Bolívar estuvo parco con el segundo, un toro serio, con romana, y el trapío del toro de plaza de primera que recibió la ovación del público. Buen comienzo y todo parecía reunido para el triunfo, toro y torero, ritmo, compás, y acople a las primeras de cambio. El toro tuvo más temple por el pitón derecho, pero más recorrido por el izquierdo. La faena, aunque con altibajos y cambios de temperamento, no perdió intensidad, y mantuvo al público atento. Hubieran asomado los pañuelos de no haber fallado con los aceros.

Román se fue de vacío, pero debió ser otro el resultado de su destacada actuación. El tercer toro tuvo codicia y acometió con prontitud y fijeza, pero tuvo poca fuerza. El trasteo inteligente y paciente de Román, alivió al toro, que fue a más, y compuso una faena de mucho contenido y transmisión al tendido. Dos pinchazos y una espada haciendo guardia emborronaron la entonada labor.

Al sexto lo toreó firme a la verónica a pesar de que el toro también tuvo la fuerza justa. Intensas las tres primeras series, dejando ver al toro, que iba de largo y llevándolo cosido a los vuelos de la muleta. A partir de la cuarta había que darle tiempo porque se fue quedando sin motor, y el remate de faena no tuvo la misma intensidad. Tarde importante de Román, que no coincide con la ficha de la corrida.

Manizales (Colombia), miércoles 10 de enero de 2024. Tercer festejo de la 69ª Temporada Taurina. Toros de Santa Bárbara (2º bis), de preciosa lámina, serios, con trapío y buen comportamiento. Algunos con escasa fuerza. Solamente el tercero fue levemente pitado en el arrastre. El cuarto, de nombre Camarero, herrado con el número 55 y de 444 kilos de peso, fue premiado con la vuelta al ruedo. Luis Bolívar, ovación con saludos y oreja; José Arcila, ovación con saludos y oreja; Román, ovación con saludos y palmas tras leve petición. Entrada: Tres cuartos. Saludaron por sus pares al sexto Emerson Pineda y Héctor Fabio Giraldo.