Fue una de las sensaciones de San Isidro. Un impacto. Llegó sin hacer ruido y sin contratos a la vista. Sin embargo, tras su actuación en la feria donde dejó entreabierta la puerta grande se ha convertido en una de las sorpresas de la temporada. Su nombre figura, por méritos propios, en boca de aficionados y profesionales. Ahora, con todo a favor, no está dispuesto a perder la oportunidad por la que lleva soñando toda su vida.
“Ahora viene lo bonito pero también lo difícil. La exigencia será mayor pero no me cambio por nadie. Estar aquí es un sueño”

