El novillero mexicano realiza el mejor toreo del primer festejo de la Feria de San Sebastián, pero el mal uso de la espada le deja sin premio.
No acabó de cuajar la novillada que abrió el telón de la feria de San Sebastián en San Cristóbal. Tan sólo Diego Silveti salvó la tarde del tedio aunque el mal uso de los aceros le dejó el esportón vacío de premios.
Lo más torero de la tarde llegó con el tercero, un astado que dejó recrearse a Diego Silveti, quien muleteó de manera templada y con gusto. Los aceros dejaron el marcador a cero, algo que también sucedería ante el sexto, con el que el mexicano demostró su capacidad lidiadora, firmeza y seguridad.
Del resto de la novillada, poco más que contar. Jonathan Guillén puso ganas pero no conectó con los tendidos. Por su parte, Juan Gómez demostró estar menos placeado.
Miércoles 26 de enero. Novillos de CAMPOLARGO y RANCHO ALEGRE (1º), bien presentados en su conjunto y nobles. JONATHAN GUILLEN: Silencio en ambos; JUAN GÓMEZ: Silencio tras aviso en ambos; DIEGO SILVETI: Ovación y palmas tras un aviso. Entrada: Más de 3.500 personas.

