(Foto: Javier Arroyo)Roberto Blanco pierde una oreja por el fallo con la espada en un festejo en el que hubo tres novillos con posibilidades.
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GALERÍA FOTOGRÁFICA DE LA COGIDA A R. BLANCO
Mario Diéguez, que se presentaba en Las Ventas, sorteó un novillo bueno en segundo lugar. Excelente fue el pitón derecho del astado, y Diéguez lo toreó en los medios con buena expresión y estética. Faena sin redondear por su escaso bagaje pero con muletazos sueltos buenos y pinceladas de personalidad. A su segundo, un animal manejable y que desarrolló clase, le cuajó buenos lances a la veronica, cimbreando el cuerpo y las muñecas. Vistoso y singular galleo por chicuelinas para llevar al novillo al caballo. Faena de corte eminentemente artista, con personalidad. Torería en las formas y sabor en los remates. Bien en el toreo al natural antes de una estocada. Hubo petición de oreja. Vuelta al ruedo.
Roberto Blanco perdió con la espada una más que posible oreja tras lograr ante el tercero, un novillo bueno, con clase y profundidad y que a la postre fue ovacionado en el arrastre, una faena dispuesta y templada. Recibió al de La Guadamilla a portagayola, alcanzando su faena los mejores momentos sobre la mano derecha por donde brotaron dos series buenas de ligazón, reunión y trazo. No hubo el mismo acople con la zurda. En el tramo final brilló una nueva serie en redondo y el cierre por sanjuaneras. Falló con la espada, sonaron dos avisos y se esfumó la oreja. Cerró plaza un sobrero de Javier Molina que resultó deslucido y desclasado. El salmantino se mostró dispuesto en un conjunto en el que puso tesón y empeño, resultando incluso volteado.
Noble, de buena condición pero blando resultó el primero de La Guadamilla. Tulio Salguero puso dedicación y temple, logrando muletazos suelto de buen trazo. Con limpieza, sin apretar al novillo. Mató de estocada tras pinchazo y saludó una ovación. Su segundo tuvo nobleza aunque poca raza y fondo. Salguero hilvanó una faena larga, tesonera, de buen concepto y dedicación pero sin mayores logros. En el turno de quites se lució por chicuelinas Mario Diéguez.
Madrid, domingo 14 de julio de 2013. Novillos de La Guadamilla, bien presentados, de variados pelajes y hechuras. Segundo, tercero y quinto, bueno; primero y cuarto, nobles y manejables pero desfondados. El sexto, un sobrero de Javier Molina, deslucido. TULIO SALGUERO: Ovación con saludos y silencio tras aviso; MARIO DIÉGUEZ: Ovación con saludos y vuelta al ruedo tras petición y aviso; ROBERTO BLANCO: Silencio tras dos avisos y ovación de despedida. Entrada: Un cuarto.
