La afición taurina balear presenció el mejor festejo de los últimos años gracias una corrida muy bien presentada y noble de Julio de la Puerta y tres toreros con ganas de agradar, cada cual en su concepto de su tauromaquia. Tan solo falló la poca sensibilidad del palco presidencial al no conceder el indulto del 5º toro del festejo, un toro que se creció en la lidia y acabó embistiendo hasta a su propia sombra, pero el usía no lo quiso ver así y no tan solo le negó el indulto, sino que también la vuelta al ruedo, algo que subsanó Juan José Padilla invitando al mayoral a dar la vuelta al ruedo junto a él con las dos orejas en la mano.
El Cordobés anduvo en Cordobés: desplantes a la galería, sonrisas y… la rana. Pero en esta ocasión se acopló con el capote en sus dos enemigos y hasta se vislumbró algún buen natural en ambos, metió los riñones en las series y hasta templó la embestidas de los astados. Oreja. El diestro se vio obligado a torear con la muleta a media altura a su segundo, escaso de fuerzas. Lo pasaportó de más de media estocada en buen sitio que fue fulminante. Oreja.
Juan José Padilla estuvo voluntarioso toda la noche, al primero de su lote lo recibió con dos largas cambiadas de rodillas y una buena serie de verónicas. Con la muleta faena variada por ambos pitones y con alguna que otra serie importante sobre todo por el pitón derecho. El diestro de Jerez no olvida que en Mallorca es donde inició su carrera taurina y se muestra muy sensible en todas sus actuaciones en la isla. Estocada y descabello, una oreja y fuerte petición de la segunda
El quinto lo brindó al subalterno mallorquín Federico Gómez en representación de todos los profesionales del toreo mallorquín: “Ya sabéis que la isla me tira mucho” señaló el diestro en el brindis. Fue un toro extraordinario. Se le vio desde el primer momento. Padilla lo recibió con dos largas cambiadas y una larga serie de verónicas y con la muleta le realizó una faena completa por ambos pitones destacando media docena de largos redondos. El toro repetía, humillaba, iba largo… Padilla se hartó de él. Y cuando nadie lo esperaba, zás!!! El diestro provoca el indulto del astado y claro, el respetable se suma a ello. El tiempo pasa y el usía le envía dos recados. Padilla acaba con el quinto de una estocada. El palco, desentonado toda la noche, tarda en conceder las dos orejas e incomprensiblemente niega la vuelta al ruedo al astado. Le faltó sensibilidad al presidente y con la que está cayendo taurinamente en Mallorca este hombre que me parece que poca afición tiene a los toros, no se dio cuenta de la repercusión mediática que habría tenido para Mallorca con este indulto, que además el toro se lo había ganado con su comportamiento en el ruedo.
El Fandi estuvo bien con el capote en ambos y demostrando en banderillas las excelentes facultades físicas que atesora. Con la muleta le compuso una buena faena por ambos pitones, destacando sobre todo las series por el pitón derecho. Estocada que hizo guardia, dos descabellos y… venga, una oreja del tercero. En el toro que cerraba plaza volvió a torear muy bien por verónicas y hasta cuatro pares de banderillas que volvieron a levantar al público de los asientos. Muleta en mano bajo el nivel de la faena sobre todo porque el astado tenía muchas teclas que tocar, el torero lo supo hacer y merecida la oreja concedida.
La gran noche taurina acabó con los tres espadas y el mayoral saliendo por la Puerta de Palma. Los toreros mediáticos nos mostraron que también saben torear.
Palma de Mallorca. Jueves, 8 de agosto. Nocturna. Toros de Julio de la Puerta, bien presentados y de muy buen juego en general, mejores 1º y 5º, para este último se le pidió el indulto. MANUEL DÍAZ “EL CORDOBÉS”: Oreja y oreja; JUAN JOSÉ PADILLA: Oreja y dos orejas; EL FANDI: Oreja y oreja. Entrada: Media plaza.
