Lleva más de una década volcada en la pintura. Paloma Camiña, aficionada desde siempre y rodeada de un ambiente familiar taurino, fusionó su pasión por la Fiesta y su vocación artística por la pintura hasta que ha logrado hacerse un hueco en el escalafón de las artes plásticas taurinas. En sus cuadros busca la visión costumbrista de la tauromaquia y sus múltiples facetas sin que en ninguna de su obras aparezca curiosamente uno de los protagonistas más importantes: el toro. Personajes como Oliver & Hardy, los Beatles o Enrique VIII aparecen en sus obras vestidos de toreros en ese afán de querer transportar la tauromaquia más allá de nuestras fronteras.
Sin caer en lo clásico, Paloma Camiña se acerca a la fiesta taurina desde otros puntos de vista como la cultura, el cine, la historia o la música
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