La Feria de Pentecostés de Nimes de 1983 culminó a lo grande. El empresario Simón Casas, en uno de sus grandes eventos, reunió en un mano a mano a dos de las grandes figuras del momento, los dos ídolos de la afición nimeña: Paco Ojeda y Emilio Muñoz, que dieron una gran tarde de toros y salieron a hombros entre el clamor de un público extasiado. Se colocó el cartel de “No hay billetes”, 21.000 almas llenaron el coliseo nimeño hasta las banderas en un festejo que despertó el entusiasmo de los aficionados, que no querían perderse este duelo de dos toreros que demostraron en el ruedo el gran momento por el que atravesaban aquella temporada.
- Paco Ojeda y Emilio Muñoz cortaron ocho orejas y salieron a hombros en una tarde memorable

